La cena de Nochebuena es uno de los momentos estelares de la celebración de la Navidad porque reúne a todos los miembros del hogar en un solo lugar para degustar un exquisito platillo debidamente planificado.
Hoy en día pocos ponen atención a la decoración de la mesa, ya sea por falta de tiempo o de recursos económicos. No obstante, decorarla es igual de importante y lo mejor es que se puede recurrir a detalles sencillos que la harán lucir muy elegante.
Un centro de mesa navideño o un adorno central es la pieza clave para una buena decoración de la mesa. Velas, guirnaldas, coronas, piezas puras, metálicas, de madera y las flores pueden convertirla en el centro de atención de la noche.
De acuerdo con Karla Argüello de Paguaga, especialista en etiqueta y protocolo, el centro de la mesa debe ser alusivo a la Navidad. Recomienda utilizar candelabros con velas en los tonos de la decoración seleccionada.
“El tamaño del centro de mesa debe ir acorde con el tamaño de la misma, que no sea muy alto para que no impida la visibilidad entre los comensales. Si optan por colocar flores, que estas sean naturales y sin olores muy fuertes”, sugiere la especialista.
En cuanto a los elementos que te permiten jugar con la decoración y a su vez proponer un estilo personalizado, Argüello propone colocar un mantel navideño que sea de un solo color para no sobrecargar tu mesa.
“Puedes colocar un mantel completo o si deseas lucir tu mesa, utiliza manteles individuales con motivos navideños o de color sólido”.
Colores y tonos
En Navidad el tradicional rojo, dorado y plateado nunca pasan de moda al momento de decorar una mesa, pero además de estos se pueden elegir otros, como el celeste aqua, rosado fucsia y verde limón, cuyas tonalidades le darán un toque más moderno a la decoración.
La especialista enfatiza que para el lugar de cada comensal se debe colocar un plato base que haga juego con la decoración, los cubiertos necesarios según el menú que se vaya a ofrecer y una copa para el agua y otra para el vino.
Cabe destacar que hay que preparar la mesa con espacio suficiente para cada comensal y lo ideal es dejar un buen espacio entre los platos para que todos puedan estar cómodos.
Las servilletas, ya sean de seda o de algodón, tienen que estar bien dobladas y con un anillo para que se vean elegantes. Unas servilletas blancas con orillas en colores navideños o adornos dorados también son perfectas para cualquier vajilla.
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