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Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo. LAPRENSA/AFP/ARCHIVO

Abuelas de Plaza de Mayo encuentran al nieto 116 en Argentina

La presidenta y fundadora de la organización, Estela de Carlotto, actualmente de visita en México, ofrecerá más detalles durante la jornada.

La Asociación Abuelas de Plaza de Mayo de Argentina informó este viernes que recuperaron al nieto número 116, hijo de una pareja que aún figura como desaparecida durante la última dictadura militar (1976-1983).

La presidenta y fundadora de la organización, Estela de Carlotto, actualmente de visita en México, ofrecerá más detalles durante la jornada.

El nieto recuperado era hijo de Ana Rubel, “maestra y estudiante de Ciencias Económicas. Cursaba el tercer año de esa carrera cuando fue secuestrada con un embarazo de dos meses” a los 27 años, detalló un comunicado de la entidad humanitaria.

Su padre fue Hugo Castro, tenía 25 años y era maestro mayor de obra que trabajó como obrero en la automotriz transnacional Ford, en la provincia argentina de Córdoba (centro), antes de mudarse a Buenos Aires a estudiar arquitectura.

“Ambos militaban en el (izquierdista) Frente Argentino de Liberación y fueron secuestrados en enero de 1977” en Buenos Aires, precisa el comunicado.

La pareja fue llevada a “algún centro clandestino de detención dependiente del Ejército” hasta que Ana fue trasladada al excentro clandestino de detención que funcionó en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), por donde pasaron unos 5.000 detendios.

“En la enfermería del sótano, dio a luz a su hijo que nació sietemesino y con un peso de menos de dos kilos” en un parto que fue presenciado por Sara Solarz de Osatinsky y Alicia Milia, sobrevivientes que dieron su testimono, y el niño fue separado de su madre, informó el comunicado.

El nieto 116

El joven “se enteró en agosto de este año que no era hijo de quienes decían ser sus padres”, amplió el comunicado.

“Al principio le negaron información pero finalmente el hombre que lo crió, un médico, le confesó que durante una de sus guardias en el Hospital Pedro Elizalde, dos hombres entraron con un bebé prematuro en brazos y que como nadie lo reclamaba se lo quedó”, detalló.

Ese hombre inscribió al niño como hijo propio y por eso, hasta hace tres meses no dudaba de su identidad.

Tras saber de su origen dudoso, el joven se acercó a Abuelas para iniciar la búsqueda y tras realizarse un ADN en forma urgente, el Banco Nacional de Datos Genéticos, que reúne las muestras de todas las familias que buscan niños robados en la dictadura, determinó su verdadera identidad.

El joven “recibió la noticia con alegría y tranquilidad, habló con sus tíos por teléfono y conoció personalmente a Alicia Milia, la compañera de cautiverio de su madre que lo vio nacer”, precisa.

Con este caso, la organización humanitaria anunció este año la restitución de siete nietos, entre ellos Ignacio Guido Montoya Carlotto, el nieto de Estela Carlotto, un caso que conmovió a la sociedad argentina y recorrió el mundo.

El hombre fue encontrado en agosto pasado, el mismo mes en que el hijo de Ana Rubel y Hugo Castro supo que los que creía sus verdaderos padres, no lo eran.

Montoya Carlotto que hoy es un músico de fusión de jazz y folclore, fue buscado 36 años como Guido Carlotto -por dudas sobre la identidad de su padre- y por una sospecha repentina se sometió voluntariamente a un estudio de ADN que confirmó en agosto que era el nieto de la abuela más popular de Argentina.

De los siete nietos hallados, cuatro están con vida y tres no llegaron a nacer, lo que se comprobó al ser identificados los restos de sus madres, secuestradas embarazadas y asesinadas en dictadura.

Unas 30,000 personas fueron desaparecidas o asesinadas en la dictadura argentina, según organismos humanitarios.

Abuelas de Plaza de Mayo, grupo fundado en octubre de 1977, estima que unos 500 niños nacieron en centros de detención clandestinos y luego fueron apropiados por cómplices del régimen.

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