El pasado 29 de diciembre recibí en La Talanguera, San Juan del Sur, la visita de los actores que integran el cuadro dramático de la peña El Bejuco.
Después de conversar sobre la teoría y práctica del arte dramático se nombró una comisión que va a explorar la posibilidad de organizar el Primer Festival de Teatro de Cámara y Ensayo de Acoyapa.
Seguidamente el secretario de la peña dijo que le habían informado que el cardenal Brenes visitó a Purificación Obando el pasado 24 de diciembre. Entonces, se solicitó a los actores de la Peña que escenificaran con “prudente temeridad” lo que ambos personajes pudieron haber conversado. Naturalmente que al no haber libreto se les pidió que en su actuación pusieran a prueba su conocida imaginación así como su portentosa improvisación.
Al subirse el telón apareció en escena Purificación y el cardenal Brenes.
Purificación: (dándole la mano a Brenes). “¿Cómo estás Politó? Te agradezco tu visita”.
Cardenal Brenes: “Muy bien, Su Eminencia. Feliz Navidad”.
Purificación: “Gracias, Polito. Quiero decirte que estoy contento con vos. Ya era hora de que no te dejaras seguir manipulando por Báez ni por Mántica”.
Cardenal Brenes: “Ya los tengo a mecate corto. Pero me preocupan las especulaciones, principalmente las especulaciones de los políticos de los partidos de oposición”.
Purificación: “De eso no te preocupés. Casi todos los dirigentes de la llamada oposición política partidaria no tienen ninguna credibilidad. Todos están vacunados contra la rabia, y los pocos que todavía no han sido vacunados andan desesperados buscando que Daniel los vacune”.
Cardenal Brenes: “Quiero recordarle a Su Eminencia que a pesar de que soy cardenal no tengo autoridad sobre los demás obispos, como sí la tengo sobre el obispo Báez y los sacerdotes a mi cargo. Cada obispado es independiente”.
Purificación: “Tampoco eso debe preocuparte. Recuerda que el Nuncio Apostólico Fortunatus Nwachukwu podría obligar a los obispos rebeldes a danielizarse o a neutralizarse pues esas son las instrucciones del papa Francisco. Debes tener presente que si bien es cierto que los obispados son independientes entre sí, también es cierto que no son independientes del Vaticano. Todos los obispos deben absoluta obediencia al papa. Ya vistes cómo Nwachukwu neutralizó al obispo de Jinotega Carlos Herrera y cómo le bajó el nivel de locuacidad a Mata”.
Cardenal Brenes: “Pero me sigue preocupando la percepción de la gente. Tengo que utilizar un lenguaje sibilino para no dar la impresión de que estoy a favor de don Daniel”.
Purificación: “Pero esto es sencillo, Politó. Te voy a poner un ejemplo. Vos no debés condenar la represión de la Policía ni la violencia de los manifestantes. Vos debés hacer un llamado para evitar la violencia, venga de donde venga, porque toda violencia engendra violencia, y no sería malo que te echaras de vez en cuando algunos chagüites a favor del diálogo, a favor de la paz. Hablando así, no quedás mal con nadie”.
Cardenal Brenes: “Esto lo entiendo bien, así como también entiendo cómo debo hablar de la moral, de la justicia, de los pobres Pero me preocupa cuando tenga que hablar de cosas concretas, por ejemplo, cuando tenga que decir algo sobre el Canal”.
Purificación: “Es lo mismo Politó. Debes manifestar que no podés opinar porque no entendés de asuntos de ingeniería como es la construcción de un Canal Interoceánico; que no estudiastes la carrera de Finanzas para poder opinar sobre la viabilidad financiera del Canal; que no sos abogado para poder emitir un criterio sobre la constitucionalidad o inconstitucionalidad de la Ley 840, etc. etc. Pero puedes decir que sí consideras que debe haber un trato justo para los dueños de las fincas a expropiarse, y que se procure no afectar mucho el medio ambiente y bla, bla, bla en fin, debes utilizar un lenguaje ambiguo, sibilino, como dijistes antes. Vos podés hablar generalidades; podés hablar de todo pero sin decir nada, y así no te comprometés”.
Cardenal Brenes: “Ahora sí estoy claro. Gracias, Su Eminencia, por sus consejos”.
En este momento se bajó el telón y el presidente de El Bejuco manifestó que todo esto era pura imaginación de los actores y que cualquier parecido con la realidad era pura coincidencia.
El autor es abogado.
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