Al caer la noche la parada de buses cercana a los semáforos de La Robelo en el kilómetro 4 de la carretera Norte se convierte en zona de peligro para los transeúntes.
Este martes la víctima más reciente fue Guillermo Antonio Ortiz Ramírez, quien al bajar de la ruta 114 fue interceptado por tres sujetos que lo despojaron de mil córdobas en efectivo y un celular.
En el forcejeo del asalto Ortiz logró sujetar de la camisa a uno de los delincuentes mientras los otros dos huyeron con el botín.
Según la víctima varias personas que vieron el atraco corrieron a auxiliarlo y golpearon a Franklin Ariel Luna, de 22 años, quien logró correr y refugiarse en el parqueo del Grupo Editorial LA PRENSA.
Un grupo de personas armadas con palos y machetes intentaron lincharlo dentro de las instalaciones de este rotativo, pero los guardas de seguridad impidieron el ingreso de los enardecidos pobladores ante el temor de que corriera la sangre y se produjera una tragedia.
Los guardas de seguridad de inmediato llamaron a la Policía y una patrulla del Distrito Cuatro trasladó al presunto delincuente a las celdas preventivas, donde el señor Guillermo Ortiz interpondrá una denuncia con la esperanza de dar con los otros ladrones.
“Yo lo que quiero es que me den mi dinero y celular, porque esos riales no son míos. Yo trabajo como conductor y ese dinero era de mi jefe”, comentó el afectado.
Franklin Ariel Luna presentaba múltiples moretones y repetía a cada momento que era menor de edad, sin embargo su mamá señaló que tiene 22 años.
“Yo no hice nada malo, no ando robando. Solo andaba tomando guaro y bailando con unos amigos. Soy bachiller y menor de edad”, dijo el presunto ladrón.
“Mama vení por favor que me quieren matar”, dijo llorando vía telefónica Franklin, quien prometió no volver a andar de vago y con malas compañías.
La víctima y el presunto delincuente se encuentran en el distrito policial.