Siete acusados – incluidos dos nicaragüenses – del crimen de un ambientalista costarricense en Limón, fueron absueltos por dudas por el Tribunal de Juicio de esta ciudad caribeña.
Los sospechosos absueltos son los nicaragüenses de apellidos López y Martínez; y los ticos de apellidos Quesada, Cash, Centeno y, dos hermanos apellidados Salmon. Contra los nicaragüenses la fiscalía había pedido 35 años de cárcel cada uno y contra los ticos 60 años de prisión cada uno, por la muerte del ambientalista Jairo Mora.
Mora, reconocido ambientalista de esta provincia caribeña, fue asfixiado luego de ser secuestrado, a finales de julio del año pasado, mientras patrullaba la playa de noche junto a cuatro a voluntarias extranjeras, para evitar el saqueo de huevos de tortugas baula y otras en peligro de extinción.
De 26 años, Mora trabajaba para el Centro de Rescate Animal Paradero Eco Tour y se desempeñaba como investigador para la organización Wide Cast, específicamente en el proyecto de conservación en Moín, Limón.
Su cuerpo presentaba golpes en el cuerpo y la cara. Falleció asfixiado cuando los sospechosos pusieron su cara sobre la arena. Su crimen y ahora el juicio ha tenido mucho eco mediático dentro y fuera de Costa Rica por la presión de grupos ambientalistas para su esclarecimiento.
El Tribunal ordenó poner en libertad a uno de los hermanos Salmon, a López y Martínez; pero ordenó prisión preventiva contra el otro sospechoso de apellido Salmon, Centeno, Quesada y Cash; por los delitos de robo agravado y privación de libertad a una familia semanas antes de la muerte Mora.
El juicio arrancó en noviembre del año pasado y testificaron 26 personas.