Mayra Sirias, exenlace de la Red de Mujeres, denunció el acoso y difamación que ella y su familia han sufrido durante seis años de parte de varios miembros de los llamados Consejos del Poder Ciudadano (CPC) en León, después de que adquirieron un terreno que fue del Banco de la Vivienda.
La denunciante aseguró que los CPC hasta llegaron a lanzar morteros contra su casa, por lo que emprendió un proceso judicial que terminó en una sentencia de culpabilidad contra los que la agredieron por mucho tiempo.
Desde las oficinas de la Red de Mujeres Contra la Violencia, en Managua, la denunciante dijo que se vio obligada a llevar el caso a los juzgados a fin de buscar justicia en su caso, pero posterior a ello ha sufrido amenazas de muerte. Los atropellos constantes que sufrió ella y su familia se transformaron en hechos delictivos, pero que además causaron daños emocionales, físicos, así como patrimoniales. “Hemos vivido seis años de tortura mi familia y yo, simplemente porque un día compramos un terreno al Estado nicaragüense y miembros del Consejo del Poder Ciudadano querían arrebatarnos lo que un día nos pertenecía”, señaló Sirias.
La familia de Sirias adquirió el terreno gracias al sacrificio que representó que una sobrina suya haya emigrado a Costa Rica hace 16 años. Relató que desde el primer día que intentaron tomar posesión del terreno los CPC lo impidieron de manera violenta.
Y cuando intentaron iniciar la construcción del cerco del mismo sostuvo que fueron amenazadas de muerte y aunque fue a la Policía para prevenir, en muchas ocasiones las boleaban para que fueran al partido de gobierno. Sirias refirió que espera que las autoridades judiciales hagan cumplir la sentencia.
SE AMPARA EN EL PODER
Reyna Rodríguez, enlace nacional de la Red de Mujeres Contra la Violencia, indicó que son pocas las mujeres que tras sufrir este tipo de atropellos se atreven a denunciar los hechos de los cuales son víctimas. Rodríguez señaló que no solo en León ocurren estos hechos, como el sufrido por Sirias, sino que han conocido de casos en otras partes del país y son personas que amparadas en el poder incurren en estos abusos. “Aprovechándose del cargo que tienen tratan de amedrentar, tratan de explotar recursos que no les competen a ellos”, sostuvo Rodríguez. “Ante este tipo de situaciones, nosotros, como Red de Mujeres Contra la Violencia, vamos a seguir dando el proceso de acompañamiento”, declaró Rodríguez.
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