Muy contentas se observaban las mujeres que formarán parte del Programa Universitario de Privadas de Libertad “generación 2015-2020”, ayer durante el acto inaugural del año académico en la Universidad Nacional Agraria, aunque las autoridades no permitieron a los medios de comunicación conversar con ellas.
[doap_box title=”¿Cuántos pasaron?” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]Telémaco Talavera, rector de la Universidad Nacional Agraria y presidente del Consejo Nacional de Universidades (CNU), expresó que aún no están listos los resultados del rendimiento académico de los estudiantes que realizaron exámenes de admisión en las universidades públicas, ya que hay que hacer consolidación en la UNAN y la UNI.
Además aseguró que se tendrá que seguir avanzando en la mejora académica, fortaleciendo el proceso de formación docente, eliminando el empirismo y capacitando más a los docentes y alumnos en Matemática y Lengua y Literatura.[/doap_box]
Las 39 privadas de libertad inscritas para este programa estudiarán la carrera de Agronegocios por cinco años en la UNA, bajo la modalidad sabatina, explicó Telémaco Talavera, rector de esta alma máter.
Este programa es parte del convenio entre el Ministerio de Gobernación, Sistema Penitenciario y la UNA, como parte de la educación con enfoque de reinserción social de las privadas de libertad.
“La idea es que ellas cuando salgan de cumplir su pena tengan las herramientas necesarias para insertarse nuevamente a la sociedad, mejorar la condición de su familia y la sociedad”, dijo Talavera.
POLÍTICA DE GÉNERO
Este programa inició en el 2007 con una promoción de varones y este sería el primer bloque de mujeres, indicó Julio Guillermo Orozco, director del Sistema Penitenciario.
“Estamos reconociendo su derecho a la educación, porque ellas están privadas de libertad, pero pueden continuar sus estudios”, manifestó Orozco.
A este grupo de presas se sumarán siete oficiales del Sistema, quienes también optaron por estudiar esta carrera universitaria.
46
alumnas formarán el Programa Universitario de Privadas de Libertad “generación 2015-2020”. Entre estas hay 39 privadas de libertad del Sistema La Esperanza y siete oficiales del Sistema.
De las 39 mujeres, 32 son de Managua, una de Chinandega, una de Masaya, dos de Río San Juan, dos del Caribe Sur y una del Caribe Norte. Entre los requisitos que cumplieron fueron ser bachiller y que la condena le permita cumplir con los cinco años de clase. La población penal de mujeres es de trescientas privadas de libertad.
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