“Somoto ha crecido, la cooperación española ayudó mucho, principalmente la que gestionó doña Ana Urchueguía y eso se le reconoce porque ahora tenemos una ciudad bonita y en desarrollo”. Eddy Ramón Jiménez, del organismo no gubernamental Fundación Somoto.
La antigua pista de aterrizaje al suroeste de la ciudad de Somoto, cabecera del departamento de Madriz, se ha convertido en la actualidad en un área de desarrollo de la infraestructura pública y social que le ha dado otro rostro a esta localidad somoteña, transformando un pueblito en una ciudad en los últimos diez años.
Eddy Ramón Jiménez, extrabajador en las oficinas de Lasarte Oria, actualmente en la Fundación Somoto, reiteró que gran parte del desarrollo y progreso de la ciudad se debió a la cooperación española, y destacó la cooperación de doña Ana Urchueguía, “de quien muchos somoteños están muy agradecidos por haber gestionado recursos para obras y proyectos sociales”.
A la cooperación de Ana Urchueguía, se le adjudica la construcción del edificio de la Alcaldía, el Palacio de la Cultura (antiguo mercado municipal), el parque infantil Lucila, la Residencia de Ancianos Monseñor José del Carmen Suazo, parte de la remodelación del parque central que hoy está bien arborizado y funciona un zoológico de animales silvestres, entre otros.
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La pista construida en los años cincuenta era utilizada por el gobierno de ese entonces para transportar en aviones tropas militares, personas gravemente enfermas, evacuar heridos y llevar víveres para las emergencias por desastres naturales.
Somoto es ahora una ciudad con una buena infraestructura pública moderna, con más del noventa por ciento de sus calles adoquinadas y con andenes e instalaciones deportivas, parques de diversión, bulevares, centros culturales y un majestuoso palacio municipal (Alcaldía).
En la zona donde fue la vieja pista de aterrizaje, de unos tres kilómetros de largo, se construyó hace diez años el edificio del Instituto Nacional Tecnológico (Inatec), posteriormente la delegación departamental del Sistema Local de Atención Integral en Salud (Silais), el Movimiento Comunal (donde actualmente funcionan las oficinas del Consejo Electoral Departamental CED) y después un redondel taurino.
A esas infraestructuras se han sumado el edificio del Cuerpo de Bomberos, la delegación del Ministerio de Gobernación (donde antes funcionó la oficina de la Alianza Madriz-Madrid), además del Mercado Municipal, el Ministerio de la Familia (Mifamilia), la Residencia de Estudiantes Universitarios, la Biblioteca Municipal y en este año el nuevo y moderno Complejo Judicial.
Pero los diferentes alcaldes (liberales y sandinistas) que ha tenido el municipio de Somoto muy poco hubieran podido hacer si no hubieran contado por diez años con la cooperación de ayuntamientos españoles.
“Sin la cooperación de los ayuntamientos españoles, principalmente de Lasarte Oria, que en ese entonces su alcaldesa era doña Ana Urchueguía, la que ayudó mucho gestionando recursos para nuestra ciudad, hoy seguiríamos siendo un pueblito”, dijo don Luis Alfonso González, quien hace algunos años fue concejal por el Frente Sandinista (FSLN) en la comuna somoteña.
“Era un viejo pueblo conocido por sus burros y se vino mejorando, no en su totalidad porque es una municipalidad que percibe pocos ingresos. Ahora es una ciudad con calles y modernos edificios”. Luis Alfonso González, exconcejal sandinista de Somoto.
Aunque lamentó que “hubo gente malagradecida que le levantó calumnias e injurias con una campaña de desprestigio a doña Ana (Urchueguía) por el solo hecho de que ella no atendía demandas personales, es un hecho que ella ayudó para el beneficio de todo mi pueblo somoteño”.
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Sin embargo, Luis Alfonso González cuestionó que desde que la cooperación española se terminó hace algunos años, el desarrollo y progreso del municipio de Somoto se estancó, “ahora vemos pocas obras de relevancia que están haciendo los alcaldes de turno”, aseveró.
Lo mismo manifestó la doctora Claudia Marieta Medina, una reconocida abogada somoteña, quien dijo que en los últimos cinco años ha visto muy pocas obras de infraestructura pública y social.
“La verdad es que los alcaldes se han dedicado más al asistencialismo con paquetes de ayuda a las familias pobres que haber mantenido el desarrollo y progreso que te puede generar fuentes de empleo y bienestar para todos”, finalizó diciendo.
VEN UNA CIUDAD LIMPIA Y MODERNA
A la ciudad de Somoto, cabecera del departamento de Madriz, llegan cada año muchos turistas nacionales y extranjeros procedentes de Estados Unidos, Canadá, Japón y España, atraídos por el famoso Cañón de Somoto, un centro declarado Patrimonio Nacional y muy visitado. La industria de las rosquillas también es un rubro que genera fuertes ingresos a este municipio.
“Esta ciudad es bastante limpia y ordenada. Yo vengo cada cinco años y veo mucha mejoras y progreso, aunque siento que lo único nuevo ahora es el Complejo Judicial”, señaló el cooperante Edwards John Smolensk, originario de San Diego, California, en Estados Unidos.
Sus avenidas se notan limpias con la instalación de recipientes de basura en cada esquina y muchas áreas ornamentadas como el parque central, además de iluminadas y con señales en las vías, pero aún persiste el problema de la inseguridad en algunos sectores urbanos y rurales del municipio por la presencia de grupos de pandillas.
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