El mejor amigo del hombre es el perro y eran los que más sobresalían en la marcha de ayer desde el frontal del templo parroquial Nuestra Señora de Guadalupe hasta la Plaza Central Salomón Ibarra Mayorga, Chinandega. Sus dueños exigieron que no se les maltrate.
“Si existen los defensores de los animales que me ayuden a que se haga justicia, a mi perra me la mataron por robarme unas gallinas y pollos”, dijo llorando Víctor Ramón Gómez Medina, de 33 años, del sector Chica Rica, barrio San Felipe, León.
Tras la agresión, Gómez cargó entre sus brazos a su mascota y caminó más de medio kilómetro para denunciar el caso ante las autoridades de la Policía. Belkis murió en la delegación policial.
“La semana pasada me robaron dos gallinas y un gallo, entonces yo interpuse la denuncia y ellos como desquite me querían robar las gallina y me mataron a mi perra y si yo hubiera estado a mí me hubieran matado”, dijo Gómez, quien teme por su vida.
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“A nosotros nos pasó con nuestra perrita Berry, nos la mataron en una veterinaria. Mucha gente prefiere quedarse callada y esta marcha es por todos los perritos, estamos contentos que hubo mucha presencia”, declaró Dixiana Vanegas, quien dirigió la marcha con apoyo del doctor Enrique Rimbaud, presidente de Fundación Amarte.
Julio Vanegas, en su silla de ruedas estaba acompañado de su perrita Stiffer, de la raza Chow, Chow, y pidió, junto con otros chinandeganos, castigo a quienes lastimen a los animales.
El ingeniero Enrique Obando, quien tiene perros en su hogar de la ciudad de El Viejo, refirió que “…Los perros y los gatos nos llenan espacio en los corazones, en especial a las personas de la tercera edad, además que ellos nos cuidan la casa”, expresó Obando.
El lunes pasado, en Chinandega, murió abatida la perrita Palomina. Tenía tres meses y era una pastor alemán. El suceso ocurrió en el reparto La Bayer tras consumir carne con algún veneno que le fue lanzada a propósito.
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