[doap_box title=”Apoyo” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]Julio Jiménez, psicólogo, explica que hay diferentes factores que influyen en el desarrollo de la capacidad de resiliencia. En ella trabaja la familia, como ejemplo y apoyo para el adolescente; la educación, para estar preparado ante los cambios de la vida; y la conciencia, que ayuda a la persona a determinar si quiere o no trabajar en la capacidad resiliente.
Entre más expuestos estemos a las dificultades, más preparados se está para superarlo, ser resiliente, indica Jiménez.[/doap_box]
Te has preguntado por qué algunas personas soportan o sobrellevan mejor una situación dolorosa que vos. O has querido saber cómo le hace tu amiga o amigo para ser tan fuerte ante la pérdida de algún familiar.
La respuesta es sencilla. Ellos tienen una mentalidad resiliente más desarrollada que vos. ¿Cómo así?
Pero antes de explicarte, te aclaramos qué significa este término. Resiliencia es la capacidad que tiene toda persona para sobreponerse ante cualquier dolor emocional o problema adverso. La mayoría de las personas no se dan cuenta de esta capacidad, o por lo menos de que la poseen, es por ello que podrías encontrar a personas demasiado frágiles y otras muy resistentes.
Así que todo dependerá del grado de resiliencia que tenés para afrentar la situación. ¿Entendiste?
VOS PODÉS LOGRARLO
Para saber más de este tema hablamos Aquí Entre Nos con Julio Jiménez, psicólogo de la UCC, y nos comentó que es importante que desde pequeño o adolescente sepás sobre este asunto.
¿Por qué? Porque esto favorecerá los procesos adaptativos en esta etapa de tu vida, lo que permitirá prepararte para integrarte al mundo adulto. ¿Listo?
Jiménez dice que además tendrás una percepción de la vida diferente.
Eso sí, tené por seguro que tu vida diaria será menos estresante, sin depresión, ni trastornos mentales y con un mayor control de tus emociones, destaca. ¿Qué te parece?
MENTE RESILIENTE
Según Jiménez, si querés desarrollar esta capacidad, entonces tomá en cuenta estos aspectos que caracterizan a una persona resiliente.
Ser positivo. Sabés que vos sos parte de la vida y que todo puede resultar para bien.
Orgulloso. Tener actitud y control de vos mismo.
Fuerte. De una u otra manera podés manejar el estrés y la presión, y no permitís que eso te hunda más en lo negativo.
Efectivo. Comparás lo que has vivido con otros ejemplos y te darás cuenta al final que no es tan malo como parece. Todo es un ciclo de la vida.
Comunicativo. Podés comunicarte y expresarte sin ninguna dificultad con las demás personas. Además que ponés atención a lo que te dicen.
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