¿Cuál es el secreto para escribir buenos poemas? ¿De qué está hecho el verso? ¿Qué aderezos debe usar un buen versificador? Algunas de las interrogantes son respondidas por los escritores invitados al XI Festival Internacional de Poesía.
Para Erick Blandón, poeta y académico, “primero se debe tener vocación poética y si tenés una predisposición abierta a la creación”, lo otro es que “para que el poema salga es enriqueciéndote la vida con nuevos aprendizajes con la lectura con la capacidad de observación de tu entorno natural, social, humano y eso te va a despertar todas las sensibilidades y si tenés la natural habilidad para escribir el poema se te va a dar”.
La poeta ecuatoriana Julia Erazo agrega que “los estímulos son muy importantes, están en el entorno nuestro, a veces no los vemos pero los sentimos, y eso es muy importante. También hay que ser honesto en lo que se escribe, ser el espejo para llegar al otro y que pueda mirarse en él, mirarse en el espejo y ahí aparecerá la poesía”, advierte.
Para mu
chos, en Granada “la poesía flota en todas partes”, la fábrica de poemas en el Parque Central es solo una muestra y los talleres que dirige el escritor costarricense José María Zonta que por cuatro años estimula la creación de jóvenes creadores y entusiastas de este género, también se pregunta sobre un punto vital en la vida de todo creador de versos.
Zonta, esta semana en el XI Festival Internacional de Poesía ha expuesto en sus talleres, ¿Cómo despertar su creatividad poética? Cuestionamiento que ha sido planteado a los 38 asistentes y cuyas respuestas solo ellos podrán responder.
NIVELES DE LA REALIDAD
No obstante, para Víctor Rodríguez Núñez, poeta y maestro, “los estímulos para crear poesía están en la realidad en el sentido más amplio que pueda existir, incluyendo la realidad social sino la realidad cultural, incluyendo lo público y lo privado, ir a todos esos niveles de la realidad, creo que el estímulo más importante para la creación es el estar atento, es decir prestar a la realidad y a lo que ocurre desde todo punto de vista, de ahí viene todo, si algo pasa y te estimula y tú lo dejas pasar está fuera del campo de la poesía”.
Gloria Gabuardi, secretaria ejecutiva del Festival y principal impulsora de los talleres de creación literaria, apuesta a que “es con los encuentros que se ese espíritu poético que está dormido despierte, y el mejor estímulo para crear es el compartir y poner en la mesa el verso”.
De igual manera, Francisco Larios, poeta y traductor, manifiesta que “creo que es en el contexto de la educación, ir a los niños pequeños donde se debe plantar la semilla, lo claro es saber qué no hacer, no los intimidaría con poemas complejos que tienen muchas palabras difíciles y con la idea de que el poeta es de otro planeta. Solo les diría que la poesía es solo otra forma de pensar sobre la vida”.
¿Cómo propiciamos la creación? “Experiencia, lectura, apertura, intuición, imaginación, conciencia, como un trabajo interior, y la escritura que es la práctica”. Pero agrega: “El asombro, el asombro!”, dice Jesús Sepúlveda, poeta chileno.
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