Tras varias horas de protesta por parte de estudiantes y docentes en el Instituto Nacional Cristóbal Colón (INCC), de Bluefields, en el Caribe Sur, en la que demandaban la no destitución de Nidia Ríos, como directora de ese centro educativo, y el no traslado de su subdirector Rafael Villegas hacia otro instituto. El Ministerio de Educación (Mined) y las autoridades políticas del Frente Sandinista (FSLN), decidieron ratificarlos en los cargos que actualmente ostentan.
Tras el inicio de la huelga y la suspensión de las clases, la alcaldesa de Bluefields Carla Martin, la secretaria política Bridget Budier, su secretario político adjunto Pedro Vargas, el delegado del Ministerio de Gobernación, Wilfredo Jarquín, la delegada municipal del Mined Sofía Soza, y Alba Vargas, secretaria de barrio del FSLN, se presentaron a ese instituto para iniciar las negociaciones.
Las negociaciones se volvieron tensas ante la intransigencia de las autoridades políticas y gubernamentales pero una comunicación telefónica acabó con todo, y el anuncio vino: “todos se quedan en sus puestos”.
HERMANA DE HÉROE
Así Nidia Ríos, hermana de la héroe y mártir nacional Neysi Ríos (LaChinita), caída en combate durante la guerra que terminó con la caída de Anastasio Somoza Debayle, en 1979, continuará en su cargo de directora, y Rafael Villegas, de subdirector.
De esa manera los 1,200 alumnos del Cristóbal Colón regresan a las aulas de clase para recibir el pan del saber.
Aparte de Ríos y Villegas, también fue nombrada como subdirectora del turno matutino del Colón, la profesora Mirla Machado.
LA PRENSA conoció que aparte de las demandas de no destitución, las autoridades estudiantiles de la Federación de Estudiantes de Secundaria (FES), demandaban a las del Mined los nombramientos de cinco maestros más para ese centro educativo.
Ese centro educativo público de secundaria cuenta, además de 1,200 estudiantes, con 35 docentes, de los cuales solo 32 apoyaron la huelga a favor de Ríos y Villegas.
“El presidente y Rosario ha dicho que el pueblo es presidente y que siempre deben escuchar la voz del pueblo pero aquí querían hacer sus voluntades y eso no es así. Al final reflexionaron y reconocieron que aquí había un pueblo haciendo sus demandas”, dijo una estudiante.