La economía brasileña registrará una contracción del 0.5 por ciento este año y la inflación llegará al 7.9 por ciento, con lo que superará con creces el tope considerado tolerable por el Gobierno, que es del 6.5 por ciento , según cálculos divulgados ayer por el Banco Central.
Los cálculos figuran en el informe trimestral de inflación del Banco Central, que reiteró sus cálculos de que el Producto Interior Bruto (PIB) registró una retracción del 0.1 por ciento en 2014. El Banco Central indicó que hay un “noventa por ciento de posibilidades” de que la inflación sea superior al 6.5 por ciento al final de este año y barajó como cálculo más probable una subida de precios del 7.9 por ciento.
El comportamiento del PIB brasileño el año pasado será anunciado en forma oficial mañana, cuando se espera que se confirme que la economía del país cerró 2014 en recesión, lo cual no ocurre desde el año 2009 cuando se contrajo un 0.33 por ciento.
El presidente del Banco Central, Alexandre Tombini, afirmó el pasado martes, durante una comparecencia ante el Senado, que la inflación se moderará a partir de abril.
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