El vicepresidente ejecutivo del Instituto Nicaragüense de la Pesca (Inpesca), Danilo Rosales, afirma que se ha reducido en más del cincuenta por ciento el uso de embarcaciones de pesca por buceo artesanal.
“Hay una buena reducción considerable de embarcaciones que estaban dedicadas a la pesca de langosta por buceo, ahora ya se han transformado a la pesca con nasa (red con forma de cilindro o cubo) (…), se han reducido en más de un cincuenta por ciento las embarcaciones que estaban pescando langosta por buceo”, dijo ayer Rosales, quien presentó un informe a la Comisión de Asuntos Laborales de la Asamblea Nacional, sobre el avance de la reconversión de la pesca artesanal a una pesca con métodos tecnológicos.
Los diputados de la Comisión Laboral están consultando a funcionarios públicos y al sector privado sobre el cumplimiento de los compromisos para la reconversión de la labor de pesca. En el pasado, la pesca de langosta por buceo artesanal afectó la salud de los muchos pescadores que bajaban a las profundidades del mar sin equipo de buceo adecuado.
Inpesca tiene un registro de 2,400 buzos y cayuqueros en la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte.
El vicepresidente de Inpesca descartó que se vaya a prorrogar el plazo, para que los pescadores no sean sancionados por seguir practicando la pesca artesanal; cuando el año próximo entre en vigencia la Ley de Protección y Seguridad para Buzos.
La primera prórroga vencía en el 2013, pero antes de la fecha, la primera secretaria de la Asamblea Nacional ya había recibido cartas de sindicatos, buzos, entre otros sectores pesqueros, en la que solicitaban una segunda prórroga, esta vez por tres años más.
La nueva prórroga vence el 13 de marzo del año 2016. Sin embargo, Inpesca asegura “que existe un plan estratégico con acciones precisas que superan de manera paulatina los obstáculos que se presentan en el proceso de reconversión técnica laboral”.
La diputada Maritza Espinales asegura que en la actualidad los buzos ya tienen mejores condiciones para realizar esta actividad pesquera, debido a tres programas de financiamiento dirigidos a nuevas técnicas de pesca y la reconversión de la pesca artesanal.
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