Los agricultores deben prepararse para el peor de los escenarios debido a que por segundo año consecutivo el fenómeno climático de El Niño traerá sequía, amenazando las metas de producción del ciclo agrícola 2015-2016, que está en puerta.
La Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), además advirtió que los precios de los productos de exportación, sobre todo del café y el azúcar, seguirán cayendo en el año.
La mayor preocupación de Funides y el Banco Mundial es por la población en los 33 municipios del Corredor Seco de Nicaragua.
El temor es que en esa zona vuelva a disminuir fuertemente el nivel de alimentos por pérdidas de granos básicos y muerte de ganado debido a la sequía, como ocurrió el año pasado.
En la presentación ayer del Primer Informe de Coyuntura Económica 2015, Juan Sebastián Chamorro, director ejecutivo de Funides, indicó que se estima “un crecimiento conservador” del cinco por ciento para la agricultura en el año, pero hay setenta por ciento de probabilidad de presenciar el fenómeno de El Niño.
El Comité Regional de Recursos Hidráulicos (CRRH) y el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) han advertido que la presencia de El Niño afectará el período lluvioso del presente año, pues se traduce en sequía en la mayor parte del país.
Chamorro recordó que la agricultura representa un 18 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) —es el tercer sector de mayor peso— y cualquier reducción en las cosechas pueden comprometer el crecimiento del país, el cual Funides estima sea de 4.5 por ciento en 2015.
“La adaptación al cambio climático es muy necesaria para Nicaragua, es el país centroamericano más vulnerable porque depende de la agricultura y la ganadería en las economías locales”, refirió Chamorro.
Funides recomendó al Gobierno y a las asociaciones agropecuarias poner en marcha planes para enfrentar los efectos del cambio climático, como sistemas de cosecha de agua, retención de humedad, cambio de cultivos en zonas vulnerables “y otras acciones que debe incorporar una agenda que debe perdurar los próximos años”.
FUNICA: AGRICULTORES NO ESTÁN PREPARADOS
María Auxiliadora Briones, secretaria ejecutiva de la Fundación para el Desarrollo Tecnológico Agropecuario y Forestal de Nicaragua (Funica), también ve “sumamente preocupante” la presencia de El Niño.
“Los agricultores de Nicaragua no están del todo preparados para enfrentar anomalías climáticas extremas como El Niño, menos si es por tercer año consecutivo”, declaró Briones.
“Hay un tema cultural, hemos venido haciendo sugerencias, pero seguimos utilizando las mismas prácticas de uso irracional (de las fuentes de agua)”, sostuvo.
Pero los productores también ven reducidos sus ingresos por las exportaciones debido a la caída de los precios a nivel internacional. Funides indicó que, por ejemplo, se espera que el precio del quintal de café caiga 13.6 por ciento, el del oro 1.3 por ciento y el del azúcar 28.5 por ciento. “No será un año bueno para los ingenios” azucareros, manifestó Chamorro.
BM PREPARA AYUDA
Luis Constantino, representante del Banco Mundial en Nicaragua, informó a LA PRENSA que actualmente discuten con el Gobierno un plan estratégico de atención para la zona seca del país.
“Nos enfocamos en programas de manejo del agua. Estamos proponiendo una conferencia (con especialistas) para que se discutan las opciones del Corredor Seco, principalmente cómo asegurar que las alcaldías tengan agua suficiente para abastecer a la población, pero también se pueden aprovechar las oportunidades de riego para la agricultura y la ganadería”, refirió.
Aún no definen cuánto financiamiento requerirá el plan, pero la estrategia “va a largo plazo, de cómo puede mejorar el país sus mecanismos de seguridad para los impactos de la sequía por el cambio climático”, afirmó Constantino.
INFLACIÓN DETERIORA SALARIOS
Luis Constantino, representante del Banco Mundial en Nicaragua, expresó su preocupación por el deterioro del salario real de los trabajadores en el país por el impacto de la aceleración de la inflación en la segunda mitad del año 2014. La Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) indicó que el salario real de los asegurados activos al Seguro Social creció 0.1 por ciento interanual. “Es preocupante porque podría hacer que los niveles de pobreza aumentaran”, expresó Constantino. La inflación se aceleró por la volatilidad de los precios a partir de mayo pasado y alcanzó un pico del 7.7 por ciento en noviembre, precisamente por la reducción en las cosechas por la afectación de la sequía.
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