A muchos les parece absurdo pero es un placer casi general: explotar los envoltorios de plástico con burbujas de aire.
Por años ha sido una pregunta que han tratado de responder diversos expertos y aunque no se tengan aún conclusiones definitivas, aquí un par de teorías, según el diario español El País: Una de las razones es el principio de la inmediatez , este principio señala que una persona siente una mayor satisfacción psicológica cuando la distancia entre acción y reacción es corta.
Es decir, cuando se presionan las burbujas el cerebro espera que exploten y al suceder, la psiquis recibe el estímulo esperado de inmediato y su satisfacción es mayor.
Otro de los factores es literalmente la satisfacción : El principio de la satisfacción apunta que el cerebro siempre busca repetir cualquier estímulo satisfactorio , es decir, toda acción que dé un resultado ya planeado. El proceso puede ser hasta adictivo , pues la energía y esfuerzoB que se invierten en conseguir el efecto son mínimos y por lo tanto una persona lo puede hacer por horas.
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