La Cruz Roja encontró muerto a un menor de 11 años de origen nicaragüense, quien junto a su hermanita de 9 años, hallada viva y golpeada; habían sido reportados como desaparecidos al no asistir a la escuela donde estudiaban en Upala, frontera con Nicaragua.
Ambos se dirigían la mañana del 19 de mayo a la escuela del caserío del Suampito, en Valle Bonito de San José de Upala, frontera con Nicaragua.
La pareja de hermanitos fue encontrada con más de una hora de diferencia. Primero la Cruz Roja y el Grupo de Apoyo Operacional de la policía hallaron a las 10:25 de esta mañana a Teresita Mendoza Espinoza, con golpes en el cuerpo e hipotermia.
La menor les indició a las autoridades donde estaba su hermano Alexander, en un precipicio, a unos 100 metros de donde estaba ella. Lamentablemente estaba fallecido. Su cuerpo fue hallado a las 11:45 de la mañana.
“Ayer recibimos llamada de familiares y de la escuela de que dos menores habían desaparecido. Realizamos una búsqueda sector pero fue infructuoso, aunque obtuvimos una pista de vecinos que fue el lugar donde habían sido vistos por última vez, 800 metros antes de llegar a la escuela”, declaró el director regional de la Fuerza Pública en la frontera norte, comisionado Rafael Ángel Araya.
“El día de hoy tempranito iniciamos la búsqueda, gracias a Dios con la suerte que pudimos encontrar a la niña, a un kilómetro del camino principal, en una zona montañosa, estaba golpeada y con hipotermia, procedimos a estabilizarla y trasladarla al hospital”, añadió.
El Ministro de Seguridad, Gustavo Mata, informó que capturaron a un sospechoso de 19 años, costarricense, la mañana del 20 de mayo. Araya dijo que el sospechoso fue ubicado por referencia de vecinos, mientras trabajaba sembrando quequisque en una parcela.
Se presume que el detenido sustrajo a los dos para abusar de la niña.
La madre de los niños, Maribel Espinoza, explicó que los dos salieron como todos los días a la escuela, a las 6:30 de la mañana. Dos horas después recibió una llamada de la maestra indicando que los niños no llegaron a recibir clases.
El centro escolar se ubica a unos 500 metros de donde vive la familia de los niños.