Cuando de grupos políticos juveniles se habla, muy pocos nombres vienen a la cabeza. Pero Carlos Bonilla, actual coordinador nacional Movimiento Democrático Nicaragüense, intenta cambiar esa idea.
Bonilla dice que su agrupación busca una nueva forma de hacer política en Nicaragua.
Eso pasa por abrirle las puertas a cualquier partido u organización que intente sumarse a sus manifestaciones o causas, sin importar quien gane protagonismo al final de las actividades.
En esta entrevista, Bonilla habla de sus relaciones con el Partido Liberal Independiente que hace dos años le cerró las puertas. También cuenta de su búsqueda de una candidatura a diputado y las protestas frente al Consejo Supremo Electoral que según él, están lideradas por una nueva generación política.
¿Cuál es esa nueva generación política? Porque en los partidos siempre son las mismas caras.
La nueva generación política es aquel joven que está saliendo a las calles, que está accionando y funcionando a la par de partidos políticos actualmente. Esos jóvenes que están saliendo a las calles no descartemos que en algún momento puedan entrar a algún partido político. Yo te puedo decir que hace más de dos años yo tuve confrontaciones grandes con el PLI. Yo hago a un lado cualquier diferencia que pueda tener con el PLI y veo que desde el día que se les hizo el llamado han estado con nosotros miércoles a miércoles. El PLI está dando apertura a jóvenes que los están capacitando dentro de su partido. Pero también hay una nueva camada de jóvenes, activistas jóvenes, independientes que no pertenecen a estos partidos pero no podemos decir que mañana puedan entrar al PLI o cualquier otro partido.
¿No saben entonces hasta dónde llega esa apertura de los partidos?
Creo que el liderazgo va salir de la calle. Creemos que los líderes van a salir de estas acciones. Se están dando grandes resultados. Por ejemplo, hay diputados que no son muy conocidos y se están dando a conocer por estas acciones en las calles, te puedo decir el diputado Augusto Valle. Desde que iniciamos las protestas es el primer diputado que encabeza esas luchas. Este diputado está respondiendo como un gran líder opositor y así puede salir una nueva camada de personas nuevas.
Se dice que la juventud es apática a la política. ¿Cómo van a lograr convencerlos?
La palabra política para muchos jóvenes significa corrupción. Política, por ejemplo, es ahorita que estamos conversando: hacemos política. Porque tratamos de llegar a un bien común entre los dos. El joven está tratando de involucrarse en la política haciendo liderazgo social. Te pongo un ejemplo. Nosotros tenemos movimientos jóvenes en la UCA que están participando en las protestas y que fueron golpeados. Un joven llama a otro joven y eso es lo que estamos logrando. Si vos te fijas la mayoría de grupos juveniles en Nicaragua siempre han sido reducidos. Pero en esta ocasión la mayoría de los que hemos visto son jóvenes.
Pero ya hemos visto otras experiencias, me acuerdo por ejemplo de los Rejudin. Ahora no se sabe nada de ellos.
Una cosa real que también existe en la política de nuestro país es que cuando surge una nueva figura política, y más si es joven y no tiene recursos económicos como un político tradicional porque no tiene dinero, inicia un ataque. Porque creen que ese joven se comienza a perfilar y puede quitarles el espacio. Inician campañas negativas tanto del Frente Sandinista como de ciertos sectores de la oposición.
¿Cuáles sectores de la oposición?
Bueno. Hay grupos en la oposición que solo piensan en sus intereses personales. Grupos que no los ves protestando pero sí quieren ir a elecciones. Esos grupos están por su propio interés. Hay grupos de la oposición que solo piensan quién va a ser el candidato pero no dicen primero limpiemos y cambiemos al Consejo Supremo Electoral. Y esos grupos son los que tienen miedo que surja una nueva camada de jóvenes políticos. Queramos o no queramos hay una nueva forma de hacer política en la calle.
¿Usted cree que todos estos movimientos juveniles puedan lograr la unidad de la oposición?
Sí. Los grupos juveniles y no solo jóvenes, pero están surgiendo nuevos grupos, están trabajando a la par de partidos políticos, no están como en el pasado viendo sus intereses personales. Un ejemplo: Si participan en esta protesta los del Partido Liberal Independiente, los grupos dicen que no van a ir a la protesta porque le voy a hacer bulto a ese partido. Ahorita si vos ves, se está haciendo protestas primero por Nicaragua.
Pero ahorita por ejemplo solo se ha visto al PLI.
El Movimiento Renovador Sandinista ha estado, han llegado los ex cachorros, la Resistencia Nicaragüense, las organizaciones de la sociedad civil como el Movimiento por Nicaragua y se están plegando otras organizaciones y comenzamos a romper con el miedo que siempre tiene la población.
Pero si los partidos grandes no lograron ponerse de acuerdo para lograr la unidad, ¿cómo lo van a hacer ustedes?
Creo que nosotros podríamos ser los mediadores en la política tradicional del país. Creo que podemos unificarlos a ellos. Y directamente se dio la primera prueba. Este grupo de jóvenes hizo el llamado a una protesta que ha crecido. Yo nunca creí protestar a la par de Eduardo Montealegre y los diputados del PLI y lo estamos haciendo porque primero está Nicaragua.
¿Pero no creen que el PLI pueda aprovecharse de esas protestas y renovar su imagen como partido político?
Ese es el decir. Cuando iniciamos la protesta nosotros invitamos al Movimiento Renovador Sandinista con una carta, al Partido Liberal Constitucionalista, al PLI, los invitamos a todos y solo respondió el PLI y el MRS. Pero fueron invitados todos. Ahí deberíamos estar todos los liberales o conservadores.
Porque en las protestas de la semana la gente decía en redes sociales y no te hablo de los sandinistas: “la oposición hace hoy lo que debieron hacer hace años” o “esta esuna bocanada de aire para la oposición”. Es decir, el protagonismo fue del PLI.
Ahí es donde nosotros queremos ver la nueva forma de hacer política. Nosotros estamos enfocados en cambiar al Consejo Supremo Electoral para que podamos tener elecciones libres y transparentes. Pero si nosotros como nueva generación política pensamos como la vieja guardia, esto no funcionará. Nosotros queremos una nueva forma de hacer política. Si nos ponemos a pensar que el PLI es el que se está tomando todos los atributos de esto, primero que todo estamos comulgando como los políticos tradicionales y segundo, nunca vamos a lograr la unidad.
¿A partir de ahora el PLI puede sumarse a cualquier iniciativa que tengan ustedes?
¡Claro! El PLI, el PLC, el MRS. Cualquier organización civil que esté en contra de este sistema. Cuando nosotros hacemos la convocatoria es para que se sume cualquier ciudadano de este país que quiera ver cambios.
¿Y usted busca algún cargo público?
Claro que sí. Tengo aspiración de poder ayudar a mi país y lograr cambios.
¿A qué aspira?
Podría ser a diputado.
Usted es una de las personas heridas tras la manifestación. ¿Qué generó toda esa violencia?
Primero que todo era la protesta número 13. 12 protestas anteriores pacíficas, no hemos tirado ni una triquitraca. Como se ha venido sumando la población y ya el partido político como el PLI está moviendo sus bases creo que este Gobierno en vez de mandar las turbas nos mandó la Policía y a los antimotines, una turba institucionalizada. Creemos que se pasaron, golpearon no tanto al político ni a los dirigentes aunque sí golpearon a los diputados. No midieron que había mujeres, niños, personas de edad, gente con muletas. Creemos que el Gobierno tenía miedo de que nos acercáramos al CSE. Pensaban que queríamos entrar y tomarnos las instalaciones. Siempre fuimos pacíficos. Solo le dábamos un volante a la población, cerrábamos el tráfico y después los dejábamos pasar.
Pero en algún momento sí hicieron pintas en el edificio del Consejo Supremo Electoral.
Son pintas inofensivas que no afectan a nadie. No estamos abusando de lo que la Constitución nos permite. Que tenemos derecho a la libre movilización y a la libre protesta. Realmente el Gobierno llegó a su límite y nosotros como población y nueva generación política estamos llegando al límite. Creemos que Ortega solo entiende si nosotros salimos a las calles. Él nos está pidiendo que salgamos a las calles y demandemos y denunciemos las cosas como lo estamos haciendo. Miedo no tenemos. Vamos a estar el próximo miércoles. Los golpeados vamos a estar y los no golpeados también.
Pero es que más bien parece que lo extraño no es que los llegaran a reprimir porque eso siempre ocurre, lo que sorprende es que los hayan dejado protestar 12 días sin molestarlos.
Pues fijate que yo creo que al principio miraban ocho jóvenes, después miraban 20, después 50. Ellos creían que la población no iba a participar porque siempre intimidan. Hace tres años pasó. Nosotros creamos las champas para protestar y vivimos dos meses ahí, y nos dieron 30 días hasta que nos mandaron a golpear. Y después de 30 días, un 19 de julio a las 4:00 de la mañana llegaron camiones de la Alcaldía con más de 200 personas a golpearnos y a robarnos. Después nos recuperamos de las heridas y nos volvimos a poner un mes más y más cerca del CSE.
¿Por qué cree que llega un punto en el que los reprimen?
Creo que a Daniel Ortega y al Gobierno se les está saliendo de las manos. Podemos ver el caso de los campesinos que están protestando por sus tierras ante ese robo descarado del Canal. Vemos a la población en Managua, que es muy difícil que se exprese en grandes cantidades, vemos que está despertando. Creo que ellos nos mandaron un mensaje ahorita: “el que sale a protestar, lo vamos a garrotear”. Sea con las turbas o sea con la represión de la Policía y sus grupos especiales.
¿Y no será que porque llegaron los partidos políticos se generó la violencia?
No porque ha habido represión antes que se unieran los partidos. Yo creo que ven que se puede lograr la unidad en acción. La unidad en acción es que los partidos políticos opositores y sus líderes luchen y encabecen esas marchas como ayer lo demostraron. Y ver a la sociedad civil y los grupos juveniles aliarse, trabajar en conjunto con ellos. En Nicaragua se puede dar la unidad de la oposición pero en acciones en el terreno. Y el Gobierno no apuesta a eso y ha hecho un gran esfuerzo para seguirnos dividiendo. Las redes sociales son buenas para eso. Ataques verbales y algunos medios se prestan para fomentar la división en la oposición y algunos periodistas inventan que alguien dijo algo de vos y te ponen a pelear en los medios de comunicación.
¿Qué resultados lograron con las protestas?
Principalmente la unificación que se está dando. No estamos pensando en elecciones ni unidades electoreras, sino en acciones en conjunto para poder demandarle a este Gobierno.
PLANO PERSONAL
Carlos Bonilla tiene 40 años. Está casado y actualmente es coordinador del Movimiento Democrático Nicaragüense.
Le gusta ver películas de acción y no le gusta el arroz aguado.
Vivió 23 años fuera del país y es diseñador gráfico.
Aspira a ser diputado y ha sido uno de los dirigentes de marchas frente al CSE.
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