El París Saint Germain se apoya en Ángel Di María, quien firmó de manera oficial ayer por cuatro temporadas para conseguir las llaves que abren las puertas del paraíso de la Liga de Campeones, objetivo de un club que ganó todos los títulos domésticos la pasada temporada.
“Había otros clubes que me querían, pero quería estar en este proyecto para ganar una segunda Liga de Campeones”, dejó claro Di María en su presentación con los colores del PSG.
Alrededor de cien aficionados del PSG se citaron en las puertas del lujoso hotel Shangri-La, cerca de la Plaza de Trocadero, en el centro de París, para dar la bienvenida al “Fideo”, presentado por todo lo alto.
El fichaje del argentino de 27 años, por una suma estimada de 63 millones de euros (segundo jugador más caro de la historia del futbol francés después de los 64 millones de euros desembolsados en 2013 por el delantero uruguayo Edinson Cavani), fue hecho oficial ayer.
Con la llegada del extremo zurdo, el “PSG de los catarís” intentarán acabar con la maldición de la Liga de Campeones, después de caer eliminados en los cuartos de final en las tres últimas ediciones.
“Vamos a poner todo de nuestra parte para llevar a los aficionados del PSG al mayor triunfo continental”, comentó el jugador en el comunicado del club.
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