Tanto autoridades locales de Transporte e Infraestructura como el encargado de la empresa constructora aseguraron a LA PRENSA que la ansiada carretera que unirá Bluefields con el resto del país (Bluefields-Nueva Guinea) está prevista que arranque a fines de este mes, aunque, aclararon que aún no tienen en sus manos la “orden de inicio” que debe llegar desde Managua.
Bismarck Aburto Fernández, encargado de la empresa constructora Meco Santa Fe, dijo que “este proyecto es para terminarlo en dos años, hasta el momento no hemos recibido la orden de inicio”.
Sin embargo, dijo que “creemos que iniciamos a finales de agosto”.
Cuando eso pase “entregaremos nuestro cronograma de obra, a partir de ahí comenzaremos a ver qué cantidad de trabajadores necesitamos”, indicó Aburto.
El delegado regional del Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI), Adolfo Doña, dijo que la Institución que representa dispondrá de dos supervisores para la construcción de la carretera.
“El MTI todavía no ha enviado a sus supervisores, cuando lo hagan que esperamos que sea antes que termine el mes se dará la orden de inicio de la obra”, confirmó.
Bismarck Aburto dijo que serán dos tramos a construir y que para eso requerirán poco más de 250 trabajadores, incluidos obreros locales.
Aburto sostuvo que ahorita se encuentran en la fase de trabajos preconstructivos. “Habilitamos los bancos de materiales y el acceso al banco de materiales”.
La carretera Bluefields a Nueva Guinea tiene años de estarse anunciando y dos gobiernos regionales anteriores han invertido fondos para esa obra sin que se haya visto avances sustantivos.
Y el actual Gobierno regional también ha fracasado en dos ocasiones, pero ahora cuentan con el apoyo económico del Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Pablo Fernando Martínez, titular del Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI), dijo hace semanas que la obra concluiría en tres años, a partir del inicio, y comprende ochenta kilómetros entre Bluefields y Nueva Guinea y que este costo supera los setenta millones de dólares.
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