Familiares de los 5 policías asesinados en una comunidad de Bluefields, lloraron desconsolados la pérdida de sus parientes.
Este 18 de agosto la jefatura de la Policía, acompañada de la Comandancia del Ejército de Nicaragua y de la Fiscalía, rindió homenaje póstumo, a los restos mortales de los 5 policías asesinados en un acto póstumo en la sede policial en Managua, a poco más de un mes de la masacre de Las Jagüitas.
Durante el acto, fue leída la orden póstuma del presidente inconstitucional, Daniel Ortega, para otorgar la medalla al valor subcomisionado Juan Ramón Torres a las 5 víctimas.
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En el mismo la jefa de facto de la Policía, primera comisionada Aminta Granera, también ordenó ascender al grado de suboficial a los policías, Santos Andrés Sevilla y Roberto Martínez Granado.
En “la emboscada” del sábado también fallecieron los policías voluntarios Wilber y Jorge González y, Wilber Pérez López.
Granera lo llamó asesinato cruel y cobarde e identificó al grupo que les asesinó como la banda delictiva “El Chofer”.
Policía había desarticulado en julio a banda delincuencial
La Policía atribuye a dicha banda delictiva los delitos de abigeato, extorsión, asesinato y robo con intimidación y que se le atribuye el asesinato de los cinco policías, el pasado sábado.
La jefa de facto de la institución, primera comisionada Aminta Granera, indicó que desde 2014 le dan seguimiento a esta agrupación.
Granera estimó que el múltiple crimen fue cometido no solo por rescatar al integrante que los policías víctimas, que antes habían apresado a uno de sus integrantes, Jerónimo Aguilar Calero, alias “La Cegua”.
Y también en represalia porque en julio les habían capturado a cinco de sus miembros, quienes enfrentan proceso en Nueva Guinea.
