La exvicepresidenta de Guatemala, Roxana Baldetti (2012-2015), en prisión desde el 21 de agosto acusada de corrupción, se mantiene internada desde el viernes en un hospital militar por quebrantos de salud, informaron hoy varias fuentes.
Baldetti fue llevada al Centro Médico Militar, al este de la Ciudad de Guatemala, y se mantiene vigilada por guardias del Sistema Penitenciario, según confirmó el Ministerio de Gobernación (Interior) a través de sus redes sociales.
La exvicepresidenta solicitó su ingreso al hospital con un cuadro de “38 grados de temperatura” y una infección, según el documento presentado por la defensa de Baldetti ante el juez Miguel Ángel Gálvez, a cargo del Juzgado B de Mayor Riesgo, que lleva el caso.
De acuerdo a la misma solicitud, la exvicepresidenta asegura que “nadie” la ha “tratado mal o agredido” durante su estancia en la cárcel Santa Teresa, donde se encuentra desde el 2 de septiembre, pero sí advirtió que tiene “temor” de una mujer guardia que habló mal de ella en “noticieros”.
Baldetti fue capturada el 21 de agosto en un hospital privado y posteriormente, tras escuchar los cargos en su contra, fue llevada a la prisión del cuartel militar Matamoros.
El juez Gálvez, sin embargo, determinó que la sindicada debía ser enviada a una prisión común y por ello fue recluida en la cárcel de Santa Teresa.
Baldetti dimitió el pasado 8 de mayo señalada de pertenecer a la estructura de corrupción aduanera bautizada por las autoridades como “La Línea”, la misma que derribó al gobierno del presidente Otto Pérez Molina, en prisión preventiva desde el 3 de septiembre apenas unas horas después de renunciar a su cargo.
La red fue desarticulada en sus mandos medios el 16 de abril por el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, y la investigación posterior de ambas entidades concluyó que Pérez Molina era el supuesto líder de la trama de corrupción.