La Iglesia morava en Bilwi, Región Autónoma del Caribe Norte (RACN), demandó en una carta pastoral emitida ayer, que se haga una evaluación del daño ambiental provocado por los colonos en territorios indígenas y se atienda a los desplazados de los territorios de Wanky Twi Tasba Raya y Wanky Li Auhbra, donde se han registrado desalojos de colonos por autodefensas indígenas.
La Iglesia morava señala que el autosaneamiento que han ejecutado los comunitarios en la zona de conflicto no es el camino parar resolver la crisis, pero ante el atraso en el proceso de saneamiento los pueblos han recurrido al camino de la violencia para resolver sus problemas de tierras con derramamiento de sangre.
Además, indica que los indígenas no quieren más derramamiento de sangre en el Caribe Norte, pero ven en la presencia de colonos una provocación permanente.
SANEAMIENTO Y SEGURIDAD
La Iglesia morava, con base en la Ley de Régimen de Propiedad Comunal o Ley 445 y la Ley 28 el Estatuto de Autonomía de la Costa Atlántica, demanda que se inicie de inmediato el proceso de saneamiento en los territorios indígenas y que comience en los territorios que tienen conflictos en la actualidad.
Asimismo demanda que el Gobierno de Nicaragua y el gobierno regional garanticen la seguridad en las comunidades indígenas para que los comunitarios puedan trabajar en paz y tranquilidad.
En la carta pastoral, la Iglesia pide que se integre a la comunidad en el proceso y que no solo estén los presidentes, wihtas y síndicos de los territorios indígenas.
Los religiosos señalan que el Gobierno debe atender a los desplazados de Wanky Twi Tasba Raya y Wanky Li Auhbra por el tiempo que sea necesario y pide que se detenga la venta de tierra.
El pastor moravo, Amílcar Padilla, evitó comentar sobre la desaforación del diputado y líder indígena Brooklyn Rivera Bryan, aduciendo que la Iglesia morava no quiere pronunciarse sobre temas políticos.
INDÍGENAS DE HONDURAS APOYAN A MISKITOS NICAS
Los concejos comunales, territoriales y la organización miskita hondureña MASTA, se pronunciaron en apoyo a Rivera.
“Queremos reiterar nuestro compromiso de acompañar en estos momentos difíciles para el líder Brooklyn Rivera y al pueblo miskito de Nicaragua, manifestamos claramente que el pueblo miskito de Honduras luchará al lado de los hermanos miskitos de Nicaragua para que les respeten sus derechos ancestrales, territoriales y humanos por el gobierno de turno y cualquier otro en el futuro”, señalan.
BROOKLYN RIVERA
La última intervención en un foro permanente sobre cuestiones de pueblos indígenas en la Organización de Naciones Unidas (ONU), pudo ser una de las causas para que el Gobierno le pasara la aplanadora oficialista en la Asamblea Nacional al dirigente indígena de Yatama, Brooklyn Rivera, pues ahí cuestionó la práctica excluyente, de discriminación y de marginación del Gobierno para los pueblos indígenas.
Además denunció que el Gobierno violenta el derecho que tienen los pueblos indígenas a la consulta libre, previa e informada en cuanto a la ejecución de megaproyectos como el del Gran Canal y el hidroeléctrico de Tumarín.
DENUNCIAN VIOLENCIA
Por otra parte, Martín Torres, uno de los más de ochenta personas —entre güiriseros y propietarios de molinos y pulperías, que contaban con avales del territorio indígena de Li Aubra, en Santa Rosa Morubila, desalojados el 11 de septiembre—, denunció la violencia y el saqueo que sufrieron de parte de miskitos, muchos de ellos con armas de guerra.
“Llegaron armados y disparando cuando entraron al caserío, gritaban todo mundo a bajo, el h de p que se mueva, aquí se muere. Y entraron disparando con R-15, M16, escopetas, rifle 22… Todos mis compañeros, eran puros civiles, salieron y comenzaron a tirarlos afuera, embrocarlos y amarrarlos”, relató Torres.