Hay actrices que trabajan en decenas de películas, van cambiando de registros pero serán recordadas, principalmente por un único papel. Es el caso de la británica Kate Winslet, mundialmente reconocida como la pareja de Leonardo Di Caprio en la proa del Titanic .
Por su papel de Rose, en la cinta de James Cameron estrenada en 1997, fue candidata al Óscar como Mejor Actriz y al Globo de Oro, y recibió el Premio del Cine Europeo.
Celebré mis 21 cumpleaños durante ese rodaje, reconocía la actriz británica en marzo de 2014, cuando fue homenajeada con una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. Titanic fue hace 18 años, ¿os lo podéis creer?, afirmaba entonces.
BUENAS Y MALAS
En ascenso
Winslet ha desarrollado una notable carrera como actriz con momentos brillantes como en Revolutionary Road (2008), en el que volvía a coincidir con Leonardo Di Caprio y consiguió un Globo de Oro.
En los últimos años, la actriz ha trabajado, entre otros títulos, en Un dios salvaje (2011), bajo la dirección de Roman Polansky; en Contagion (2011), a las órdenes de Steven Sonderberg; Labor Day (2014), por la que recibió una candidatura a los Globo de Oro, y en producciones muy taquilleras, como las adaptaciones de las novelas de la estadounidense Veronica Roth Divergent (2014) y su secuela Insurgent (2015), éxitos que no han dejado de lado las noticias sobre su vida privada, en continuo crecimiento.
SUS HIJOS
En este apartado, Kate Winslet tiene un gran recorrido. Es madre de tres hijos de tres matrimonios diferentes. El último nacido hace dos años, Bear Blaze, el primero con Ned Rocknroll, sobrino del millonario británico Richard Branson, dueño del grupo Virgin. Winslet y Rocknroll se casaron en diciembre de 2012, apenas un año y medio después de conocerse.
Con anterioridad, la actriz británica estuvo casada con el cineasta Jim Threapleton (1998-2001), padre de Mia Honey, nacida en 2000; y entre 2003 y 2010 con el famoso director Sam Mendes, unión de la que nació Joe Alfie en 2003.