En octubre la medicina manifiesta su preocupación por los huesos, por lo cual se ha creado el “mes de la osteoporosis” para prevenir este padecimiento mundial.
La Fortaleza máxima de nuestros huesos (Densidad Mineral Ósea, DMO) se alcanza entre los 18-25 años.
Una persona con osteoporosis o “huesos débiles” es aquella enfermedad crónica en el cual los huesos disminuyen su DMO y se deteriora su microarquitectura, lo cual conlleva que se vuelvan frágiles y porosos “como una espumilla”.
No debe esperar padecer una fractura, dolores óseos o articulares, o sufrir peligrosas fracturas de cadera , lo que produce la hospitalización.
Además que tiene alta mortalidad en el primer año que ocurre, en uno de cada cuatro afectados.
Las deformidades en ancianas, como la joroba conocida como “giba de viuda”.
Los médicos internistas llevamos campaña permanente de lucha contra la osteoporosis, identificando personas que tienen más riesgo de osteoporosis y fracturas.
La edad avanzada, mujeres que presentan menopausia antes de los 45 años, personas que no caminan (sedentarismo), falta de vitaminas B-1 o de la menstruación (menopausia) antes de los 45 años, extirpación bilateral de los ovarios o el padecer problemas médicos o consumir medicamentos que debilitan los huesos son casos que deben valorarse.
Se diagnostica la osteoporosis conociendo antecedentes, realizando un examen físico y una densitometría ósea, que diagnostica cuando hay una DMO antes de que se produzca una fractura.
Toda mujer menopáusica debe realizarse este estudio.
Lo más importante es la prevención de la osteoporosis garantizando una nutrición que contenga 1200-1500 miligramos de calcio por día, en especial a las menopáusica. Se debe evitar el abuso del consumo de alcohol y tabaco, y es recomendado practicar ejercicio regular.
Las caídas de los adultos mayores deben ser prevenidas. El médico internista tiene entrenamiento para atender estos casos que afectan la calidad de vida, salud y vida.
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