La edición número 30 de los llamados “miércoles de protesta”, en demanda de elecciones electorales transparentes, terminó violentamente.
Los miembros de la Coalición Nacional por la Democracia, que lidera el Partido Liberal Independiente (PLI), marchaban pacíficamente, pero al llegar a la Rotonda de Metrocentro, fueron agredidos a pedradas, con huevos, pintura y aceite negro por miembros de Rejudin y Forfunic.
“Desafortunadamente son infiltrados que manda el Frente Sandinista para interrumpir el proceso de la protesta”, denunció el diputado Eduardo Montealegre.
Durante las agresiones las tropas antidisturbios de la Policía se limitaron a observar las agresiones de ambos lados.
“Nos defendemos en manada, porque estamos cansados de los atropellos y que un grupo satélite del orteguismo y de la Policía pretenda amedrentarnos”, dijo el concejal del PLI Omar Lola, uno de los que participó golpeando y fajeando a David Campos, miembro de la Fundación Forjando el Futuro Nicaragüense (Forfunic).
LA PRENSA consultó a Campos sobre por qué comenzó el conflicto agrediendo a los simpatizantes del PLI, pero no pudo contestar nuestras preguntas.
En Somoto, Madriz, un grupo de veinte personas se apostó también frente a las oficinas del CSE, demandando elecciones libres.
Armando Rodríguez, habitante de la comunidad de Moropoto, en el municipio de San Lucas, dijo que la dirigencia del PLI ha perdido poder de convocatoria, por eso llega menos gente a las protestas.
