Luego de haber salido de una fiesta en un restaurante Wester Javier Cano, de 24 años, con una gran herida en su cabeza, fue encontrado muerto este lunes a orillas de la Carretera Panamericana entre Jinotepe y el municipio de El Rosario, Carazo.
El cuerpo estaba boca arriba al frente de una quinta en medio de la oscuridad y por las características de la lesión este pudo haber sido agredido con un machete.
Se presume que la víctima estaba en la fiesta en compañía de tres conocidos, dos hombres y una mujer, se embriagó demasiado y empezó a hacer escándalo, pero fue retirado inmediatamente del lugar por los guardas de seguridad.
Una señora, quien se identificó como Rosibel Cano, hermana del ahora occiso, dijo que ella también se encontraba en la fiesta y que vio a su hermano por última vez como a eso de las 12:00 a.m. del domingo.
Wester Cano no tenía un trabajo estable, pero se dedicaba a pintar casas y a hacer instalaciones de gypsum, era originario de Jinotepe y vivía en el barrio Ana Virgen Noble, frente a los tanques de Enacal.
Según la valoración del forense, este ciudadano murió de una herida provocada por un arma blanca que le generó una hemorragia masiva y un trauma craneoencefálico severo.
La Policía ya había capturado a los tres sospechosos de haber matado a Wester, pero no se dieron a conocer sus identidades.
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