Un grupo de siete sindicatos de trabajadores del Canal de Panamá exigió ayer una inspección y auditoría externa “independiente” de las obras del tercer juego de esclusas de la ampliación de la vía acuática antes de que sea entregada por el contratista, Grupo Unidos por el Canal (GUPC).
“Cuando hablamos de una inspección y auditoría externa de las obras nos referimos a una en la que quienes inspeccionan y auditan no pertenezcan o estén asociados a la administración de Jorge Quijano (Autoridad del Canal de Panamá) y Roberto Roy (ministro de Asuntos del Canal y presidente de su Junta Directiva), pues ellos se han convertido en parte del problema al no haber sido transparentes en el manejo de la información sobre los problemas de esta obra”, dicen en una declaración conjunta.
El documento lo suscriben organizaciones que representan a casi todos los diez mil trabajadores de la vía de diferentes especialidades.
Según sus dirigentes, hay “muchas dudas” sobre los “problemas de ingeniería” en las nuevas esclusas, construidas por GUPC, que es el segmento más delicado y oneroso de toda la ampliación.