Después de dos años, Daniel Cadena regresa a España con dos banderas, la de su origen y la nicaragüense. El país lo adoptó deportivamente desde el 2014, año de su nacionalización, y ahora se identifica como hispano-nicaragüense donde quiera que vaya, incluso Eslovenia, el sitio en el cual jugará al futbol con el NK Celje en 2016.
Cadena asegura sentirse muy agradecido por el país y su gente, que siempre le dieron cariño. Dice que se va con grandes recuerdos y satisfacciones y regresará de visita cuando pueda o un club lo quiera. O tal vez lo haga pronto, en tres meses más o menos, si recibe una nueva convocatoria a la Selección Nacional de Futbol.
“Tengo deseos de volver a la Selección. Cuando el técnico (Henry Duarte), me llame seguro que vengo, pueden contar conmigo el país y la Selección”, confiesa Cadena. “Vestir la Azul y Blanco está siempre presente en mí. Y si me llama para los partidos que sean, estaré aquí. A la convocatoria de la Selección nunca se le tiene que decir no, porque es como el llamado de la familia”, considera.
Cadena tiene un profundo agradecimiento a la Azul y Blanco. Gracias a ella logró escalar otro peldaño en su carrera. “La participación en la Selección que fue fundamental. Eso me ha impulsado a jugar en Europa, las cosas se dicen como son”, subraya en forma de reconocimiento.
El delantero se ve con éxito logrando un liderato de goleo y un título con Ferretti, pero deja una asignatura pendiente: triunfar con la Selección.