El presidente saliente de la Asamblea venezolana, Diosdado Cabello, está pidiendo la sustitución del ministro de Defensa, el general Vladimir Padrino López, quien está al frente de la Fuerza Armada Nacional.
Según el diario ABC de España, esto sería para hacerle pagar por el enfrentamiento que tuvieron el día electoral.
De acuerdo a la información publicada por dicho diario, Padrino podría pasar a retiro la próxima semana (a partir del 14 de diciembre), cuyo contexto en plena tensión política podría afectar a otros mandos militares.
“Cabello está pidiendo la cabeza de Padrino, y los mandos más radicales también están presionando”, afirman fuentes del diario ABC con acceso a la cúpula militar, quienes aseguran que cuando el ministro se opuso a las intenciones de Cabello de tomar la calle utilizando a paramilitares, éste amenazó al general con una auditoría de su gestión, procedimiento que el fallecido presidente de Venezuela, Hugo Chávez, siguió para hacer encarcelar en 2009 al general Raúl Baduel, compañero de armas suyo que también fue ministro de Defensa y que cayó en desgracia por sus discrepancias.
Padrino, titular de Defensa desde octubre de 2014, se le ha cumplido ya el periodo activo, por lo que se podría alegar una razón meramente administrativa y no política para su recambio.
CONFLICTO DE PODER ENTRE MADURO Y CABELLO EN NUEVO CARGO
El origen militar de Diosdado Cabello sería una de las causas por las que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, preferiría impedir que uno de los allegados al dirigente del Parlamento sea el que asuma el Ministerio de Defensa, ya que esto aumentaría la popularidad y poderío de Cabello en el chavismo, de acuerdo a la información de ABC.
Al parecer, Cabello quiere promover al general Juan García Toussaint, quien ha sido señalado como alguien posiblemente relacionado con el narcotráfico, por su colaboración con el general Hugo Carvajal, acusado formalmente por Estados Unidos.
La imagen que se ha ganado el actual ministro de Defensa a nivel internacional por su intervención para impedir una situación de violencia, que habría sido provocada desde el chavismo como excusa para suspender los comicios antes de que se proclamaran los resultados, ha molestado a la cúpula chavista.
Según ABC, al general no le quedaba mucho margen de maniobra si quería preservar la unidad del estamento militar: en los centros en los que votaron los militares y sus familias, en los que no está inscrito personal civil, la oposición venezolana obtuvo dos tercios de los votos, de acuerdo con las fuentes antes citadas. Era un dato al que ya apuntaban las encuestas realizadas por el servicio secreto en los cuarteles.