Para que Nicaragua logre la añorada meta de los tres mil millones de dólares en ingresos por exportación de productos (sin incluir zona franca), estas deberían crecer a un ritmo del 18 por ciento anual, un nivel de expansión que requiere un esfuerzo sin precedente del sector público-privado para tecnificar, diversificar y transformar la matriz productiva del país.
Azucena Castillo, gerente general de la Asociación de Productores y Exportadores de Nicaragua (APEN), recordó que al igual que este año en 2016 el sector exportador nicaragüense afrontará la volatilidad a la baja del precio de las materias primas, además, los efectos del cambio climático se seguirán sintiendo en la agricultura.
“Hay que hacer inversiones, hay que diversificar los productos que exportamos, hay que darle valor agregado y explorar otros subsectores como son la agroindustria, porque hay demanda en los mercados internacionales (de productos) que son factibles producirse en Nicaragua, pero nosotros nos hemos quedado sujetos a los 12 productos que exportamos y hay otros que han dado señal de que sí se puede, como por ejemplo el cacao”, precisa Castillo al explicar lo que debe hacer Nicaragua para lograr los tres mil millones de dólares en ingresos por exportaciones.
Si bien Estados Unidos continúa siendo el primer mercado de importancia para las exportaciones de Nicaragua, Castillo menciona por ejemplo que las exportaciones locales apenas llegan a 17 de los cincuenta estados que integran ese país, pese a que gozan de los beneficios del Tratado de Libre Comercio (DR-Cafta, por sus siglas en inglés).
“Si logramos las acciones de diversificación y mejora en la productividad, y comenzamos a invertir en las capacidades para formar a nuevos exportadores, creo que sí vamos a lograr los tres mil millones de dólares, si todo sigue sin cambiar no creo que lo logremos”, afirma.
Además diversificar el destino de las exportaciones permite distribuir mejor el riesgo, para no depender de un listado pequeño de clientes para todos los productos. “También se debe diversificar la matriz exportable, aunque es más complicado también puede lograrse, es simplemente presentar más productos, en presentaciones distintas, tratar de no vender a granel sino en presentaciones más cercanas a las que demanda el consumidor final y moverse hacia el valor agregado”, dice por su lado Juan Sebastián Chamorro, director ejecutivo de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides).
Teniendo en cuenta que la tendencia del mercado mundial es que los commodities mantendrán un ciclo de precios a la baja, Chamorro considera que debe considerarse la posibilidad de moverse hacia otro tipo de productos.
“La zona franca se convierte en una opción de diversificación interesante. Hace siete u ocho años exportábamos casi solo textiles, hoy vendemos accesorios para automóviles. Eso hay que profundizarlo, si ya estamos haciendo los arneses, creo que también podemos hacer asientos o algún otro componente del vehículo que requiera ensamblaje”, aconseja Chamorro, quien considera que los call center y otros mecanismos de exportación de servicios y el turismo también deben considerarse como opciones de diversificación.
BID ALERTÓ A REGIÓN
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en su reporte denominado “Estimaciones de las Tendencias Comerciales de América Latina y el Caribe 2016”, alertó a la región de que existen potenciales riesgos de que en 2016 se prolongue la depresión en el precio de las materias primas. “No se vislumbran indicios de una reversión de la fase bajista de las cotizaciones de las materias primas, que se acercan a los mínimos del inicio del auge exportador a inicios de los años 2000”.
Además, menciona que “el modesto crecimiento de Estados Unidos y la Unión Europea ahora se conjuga con una desaceleración de la economía de China y con una erosión del propio intercambio intrarregional, todo lo cual resta impulso a la demanda real para las exportaciones”, precisa en el documento donde urge a tomar medidas a nivel de América Latina y el Caribe.
Castillo reconoce que este año con dificultad Nicaragua logrará los 2,500 millones de dólares en exportaciones, lo que confirma cada vez más la urgencia de comenzar a sentar las bases que transformar la matriz exportadora.
Según el Programa Económico y Financiero publicado por el Banco Central de Nicaragua correspondiente al periodo 2014-2018, para este año se proyecta 2,739.3 millones de dólares en ingresos por exportaciones tradicionales, es decir sin incluir zona franca, y para el próximo año la meta es 2,975.9 millones de dólares.
Sin embargo, al 30 de noviembre de este año las exportaciones en valores sumaban 2,343.1 millones de dólares, 6.4 por ciento menos comparado con los 2,504.2 millones de dólares de igual periodo del año pasado.
“De continuar con la tendencia a la baja difícilmente se superarán los 2,500 millones de dólares al concluir 2015”, enfatiza Castillo.
“Desde hace dos años venimos insistiendo en que hay que tomar acciones, no podemos seguir echándole la culpa al cambio climático o estar dependiendo del vaivén de los precios internacionales, pero para eso hay que hacer uso de la innovación y la tecnología”, precisa.
“Otro tema fundamental es mejorar la productividad en todos los sectores porque en la medida en que otros países mejoren la educación y los costos de la energía nosotros vamos a ir perdiendo competitividad y con ella el mercado para nuestros productos. Por eso es que insistimos en el tema de la tarifa eléctrica porque en otros países de Centroamérica está bajando y aquí no y eso nos hacer perder competitividad”, advierte por su lado Chamorro.
LA AGRICULTURA PROTEGIDA
Entre los pasos que el país planea dar el próximo año, para afrontar los desafíos locales e internacionales en materia de exportación, es incursionar en el uso de las técnicas de la agricultura protegida.
Castillo menciona que como APEN este año lograron que inversionistas de Holanda firmaran dos cartas de intención, para ayudar a unos cinco productores nicaragüenses para instalar en Nicaragua un parque agroecológico posiblemente en occidente del país y que operaría bajo el régimen de zona franca.
SEGUIR EJEMPLO
El modelo exportador nicaragüense debe seguir el ejemplo de otros países que han desarrollado políticas contracíclicas, que permitan ahorrar recursos durante los tiempos de buenos precios, para enfrentar los tiempos malos.
“Lo ha hecho Chile con el precio del cobre y más recientemente Perú y se ha comenzado a hacer en Nicaragua con el café, con este fondo que están aportando los productores y que permitirán promover la innovación tecnológica, porque no se trata de que haya una finca modelo sino que todas se desarrollen, pero esto requiere del concurso del sector público y privado”, dice Juan Sebastián Chamorro, director ejecutivo de la Fundación Nicaragüense de Desarrollo Económico y Social (Funides).
MÁS DE 4,000 MIPYME CAPACITADAS
La gerente general de la Asociación de Productores y Exportadores de Nicaragua, Azucena Castillo, informó que de cara a la preparación de los exportadores este año se capacitaron a 4,644 pequeñas y medianas empresas.
Se ejecutaron nueve proyectos entre los que citó: Promoción de la Equidad de Género en las Cadenas de Valor de la cooperación suiza.
Se continuó con las empresas anclas, promovido por Agencia para el Desarrollo Internacional de los Estados Unidos.
Hermandad de municipios de Holanda: Aldea Global, Frijol Condega, Cacao El Rama, B2B, Fortalecimiento Institucional.
Vecoma: Promoción de cadenas de valor.
Woord an Dad: Promoción de cadenas de valor.
Banco Mundial: Reducir la Vulnerabilidad del pequeño agricultor al riesgo de precios.
BID-Fomin: Expansión del Sistema de Trazabilidad de Carnes TRAZAR-nic, entre otros.
