Los Tigres de Chinandega y el Oriental de Granada han sido los equipos más consistentes a lo largo de la temporada, sobre todo en los momentos más duros, como en esta recta final, y como premio están de frente a los playoffs, dejando al Bóer y a los Gigantes peleando por el último puesto clasificatorio.
Ambos volvieron a ganar anoche, con el venezolano Darwin Cubillán estableciendo un nuevo récord de juegos salvados en Granada y Enmanuel Meza limpiando las bases con un jonrón de piernas en Chinandega.
Con seis juegos para terminar la temporada regular, los Tigres le sacan tres partidos de ventaja a los Gigantes y cuatro al Bóer, así que prácticamente pueden considerarse en los playoffs y ahora la lucha estará centrada en disputar con el Oriental el primer lugar, que da el boleto directo a la Serie Final.
En Granada, Iván Marín le pegó un hit al lanzador más difícil de descifrar en la Liga de Beisbol Profesional de Nicaragua, Jhonny Polanco, para empujar dos carreras que rompieron un empate en el octavo inning y dejaron la mesa servida para que Cubillán quebrara la marca de rescates de Boanerges Espinoza, al sellar el triunfo del Oriental 6-4 sobre el Bóer.
La tribu inició caliente con tres anotaciones en el primer inning ante el venezolano Gabriel García y agregaron una más en el tercer por jonrón de Juan Carlos Urbina, pero los relevistas Róger Marín, José Elías Villegas –el ganador- y Cubillán cerraron las puertas por completo, dándole la oportunidad a la ofensiva de contragolpear.
El dominicano José Campusano comenzó a descontar por los granadinos con un vuelacercas en el cierre del tercero frente a su paisano Roberto Novoa. Dos más en el quinto estrecharon la pizarra a 4-3.
Ante la urgente necesidad de ganar, el rematador Jhonny Polanco fue enviado a la trinchera más temprano de lo usual, en el octavo inning y por primera vez en la temporada fue frágil. Antes de esta salida el violento cerrador no permitía carrera y solo le conectaban tres hits en 15 innings, pero ayer en el octavo episodios le hicieron tres carreras limpias y le dieron cuatro imparables, incluyendo el decisivo de Marín, así que cargó la derrota.
Mientras tanto, en Chinandega, los Tigres sin varios de sus titulares por lesión y por el otro lado los Gigantes fortalecidos con el regreso de Yurendell de Caster y Ramón Flores, tras cumplir una sanción de cinco juegos, no marcaron diferencia.
Los felinos mostraron que no solo tienen garras, también corazón para imponerse 5-3. El batazo clave fue una línea al rincón derecho de Enmanuel Meza en el fondo del quinto episodio para impulsar a Marvin Martínez y Rafael Estrada, al mismo tiempo que Meza le daba la vuelta al cuadro para anotarse un jonrón dentro del campo.
Ese batazo rompió un empate a dos, que con los relevos de José David Rugama –el ganador-, Raúl Ruiz y Wilder Rayo, fueron suficientes para contener a los rivenses, que en el papel tienen una alineación de película, pero que no ha dado los resultados esperados.
El debutante tirador dominicano Jonathan Aristil fue el perdedor. Entró en el sexto episodio después que el abridor Carlos Téller dejó el partido 2-2 y fue la víctima del tablazo de Meza.
Lo más que pudieron hacer los Gigantes por descontar, fue por un cuadrangular solitario de Dwight Britton en el noveno.
El venezolano Jonel Pacheco pego un jonrón en el tercer inning por los Tigres y en total dio par de hits en tres turnos para elevar su promedio a .412, confirmándose como líder.