El apoyo que mostraron los diputados del Partido Liberal Independiente (PLI) a la junta directiva impuesta por el oficialismo en el parlamento es catalogado como “una mala estrategia política” por otros grupos opositores del país.
Carlos Bonilla, del Movimiento Democrático Nicaragüense (MDN), opina que con esta estrategia de la oposición en la Asamblea se pierde todo el esfuerzo que se hace ante la población para que vea una verdadera oposición en el país.
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“No queremos que se pierda todo el esfuerzo, la población nos identifica como oposición y si quienes nos representan en la Asamblea se equivocan, nos llevan en el saco a todos (los opositores)”, dijo Bonilla, quien actualmente recoge firmas en los barrios de Managua para solicitar a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a la Unión Europea (UE) que observe las elecciones nacionales de noviembre próximo.
“Queremos que su discurso de los ‘miércoles de protesta’ (exigiendo elecciones libres) se defienda también dentro del hemiciclo”, demandó.
El PLI votó el pasado sábado para que cinco diputados sandinistas y un aliado del partido de gobierno ocuparan cargos en la junta directiva del parlamento. A la oposición solo le cedieron un cargo que recayó en la diputada leonesa María Eugenia Sequeira, electa segunda vicepresidenta.
El diputado del PLI, Pedro Joaquín Chamorro, alegó en el plenario que a la oposición le correspondían dos cargos.
“Admiramos la lucha de la oposición en Venezuela, preguntémonos si los diputados opositores venezolanos votarían por Diosdado Cabello para ser reelecto presidente de la Asamblea”, cuestionó Bonilla.
Los diputados del PLI votaron para que se reeligiera como presidente de la Asamblea Nacional el sandinista René Núñez. Bajo su administración se aprobó la Ley del Canal Interoceánico y se permitió que el presidente inconstitucional Daniel Ortega violara la Constitución.
La oposición alega que no cuenta con los votos para imponer su propia directiva en el parlamento.
EL SACRIFICIO POLÍTICO
El diputado Alberto Lacayo, diputado del PLI, reaccionó a las críticas que reciben por haber votado junto con la bancada del FSLN para reelegir a la junta directiva de la Asamblea Nacional, diciendo que fue un “sacrificio político” que asume su partido para tener el único puesto en la directiva a través de la segunda vicepresidencia.
“Creo que en este momento para liberar a Nicaragua hay que hacer todo tipo de sacrificios, incluso sacrificios políticos como el que nos tocó hacer ayer (el sábado), votar por miembros del Frente Sandinista para poder tener ese escaño (en la Directiva) con el ojo avizor de María Eugenia Sequeira”, dijo Lacayo.
El PLI también votó por el diputado Wilfredo Navarro, electo por el PLC, pero aliado del FSLN, para que ocupara la tercera secretaría de la Asamblea Nacional.
Lacayo fue uno de los diputados PLI, junto con Carlos Langrand, Raúl Herrera e Indalecio Rodríguez, que no votaron por Navarro.
