Leonel Estrada, capitán del barco pesquero Two Friends, que recuperó del agua a nueve de los trece costarricenses ahogados en Little Corn Island y salvó a los restantes pasajeros durante la tragedia acuática del sábado 23 de enero, dijo que les avisó del incidente a las autoridades de la Naval pero “nunca respondieron al auxilio”.
“Yo llamé a Capitanía pero nadie contesta (contestaba), estuve llamando a Capitanía pero pareciera que no tienen radio, esos hace tiempo que no tienen radio, traté de llamar al número de teléfono pero tampoco funciona, hablé con mi esposa (por teléfono) para que fuera a la Naval para venir a ayudar a esta gente, de ahí no seguí (llamando) porque tenía que ayudar a la gente”, narró Estrada, de origen miskito.
Según la Ley de Transporte Acuático, las Capitanías de Puertos son unidades de Distritos Navales ubicadas en cada puerto de la República, que tienen como función primordial “garantizar en lo que corresponda, la seguridad del tráfico marítimo, lacustre y fluvial, en todo el territorio nacional y en sus aguas adyacentes”.
En este caso, Capitanía de Puertos es una dependencia del Distrito Naval Caribe (DNC), de la Fuerza Naval del Ejército de Nicaragua, dedicada, entre otras tareas, a la autorización de zarpes y control de tráfico de los distintos tipos de embarcaciones.
Estrada dijo que cuando avistó la lancha Reyna del Caribe volcada y los pasajeros flotando en el agua, se dirigió al lugar y les ayudó sin esperar respuesta de Capitanía.
ATARSE A LANCHA: FATAL DECISIÓN
“Nosotros veníamos de alta mar y cuando estábamos a media milla apareció una panga de pasajeros, no sabíamos que se estaba hundiendo, parecía que estaba llena de agua pero al llegar cerca se dio vuelta”, explicó el pescador originario de Bluefields.
Agregó que luego, unos pasajeros subieron a la panga volcada y la otra parte se quedó abajo (de la lancha) “amarrados con mecate, con la frustración se amarró (la gente), esa fue la gente que murió, yo le dije a los muchachos (sus marineros) que había que tirarse al agua, al auxilio”, confió el capitán.
“Monté a veinte gente (náufragos) en mi barco, salvados, pero una de ellas no aguantaba y falleció en el barco, la señora falleció, eso fue como a la 1:40 p.m. y ya después como a las cuatro y pico yo llamé a la señora otra vez (su esposa) y habló con la Capitanía, y estaban informados pero todavía no habían llegado (al sitio del accidente)”, narró Estrada.
Al igual que él, una juez de Corn Islands, Shura Welcome, sobreviviente del accidente, expresó que no había autoridad naval, civil o militar, que controlara los zarpes el día de la tragedia.
A JUICIO POR TRAGEDIA
Hoy 27 de enero se espera que sea juzgado en la ciudad de Bluefields Róger Hilario Blandón, conductor y propietario de la lancha volcada. Así lo informó su defensa técnica, Boanerges Fornos.
“La oficina de Relaciones Públicas del Ministerio Público nos informó que todo está en Bluefields, por eso nosotros nos trasladamos hoy (ayer) para allá”, dijo Fornos.
Blandón cumplió ayer 72 horas de estar detenido en El Chipote junto a su ayudante Ellon Absalón Pratt. Desde el día que fue detenido, sus familiares y abogado no han podido establecer comunicación con él.
Fermín Blandón, hijo de Hilario, indicó que en la zona de Big Corn Island y Little Corn Island se están recogiendo firmas en apoyo, pues la población está inconforme con la detención del panguero, que desde hace seis años trabaja en la zona en recorrido turístico en lancha.
“La gente se está levantando, por cómo se está manejando este caso, porque no hubo prohibición de la Fuerza Naval a como se ha dicho y lo ratifica la juez que iba en la lancha, si se nos hubiese prohibido el zarpe no hubiéramos salido, pero ese día no solo nosotros salimos”, afirmó Fermín.
Lea: Tres olas provocaron naufragio en Little Corn Island
DEBILIDAD DE FUERZA NAVAL
Milton Arcia, presidente de la Cámara Nacional de Transporte Acuático (CNTA), dijo que van a respaldar al capitán acusado, “pues la tragedia lo que revela no es la culpa de una persona sino la debilidad de la Fuerza Naval, que no tiene un puesto en Little Corn Island”.
“Creemos que hay que hacerse una investigación a fondo, esa embarcación tiene permiso o sea está legal, ¿qué es lo que sucede? ¿Por qué dicen que esta embarcación no tiene permiso? La situación es que esta embarcación salió de la islita (Little Corn Island) y ahí no existe Fuerza Naval, los zarpes los dan en Big Corn Island”, sostuvo Arcia.
Según información de la CNTA, el día del incidente, de las 14 lanchas que hay en la zona, salieron cuatro: Róger Saúl (también propiedad de Hilario), El Isleño, El Águila Express y por último La Reyna del Caribe.
Arcia dijo que sería una injusticia enjuiciar al propietario y conductor de la lancha cuando el sistema está en “pleno desorden; solo en este momento se logra ver por la tragedia sucedida”.
“Creo que es una injusticia lo que se está haciendo con este transportista, por eso lo vamos apoyar, la solución no es buscar un culpable y meterlo preso, sino buscar soluciones a fondo y lo primero que se debe hacer es autorizar embarcaciones de sesenta pies y no lanchitas que no aguantan olas de cuatro metros”, agregó.
TRES MÁS REGRESAN A CASA
Ayer los cuerpos de las tres personas encontradas el lunes 25 de enero, fueron llevadas al Instituto de Medicina Legal, para luego dirigirse al Aeropuerto Augusto C. Sandino, desde donde fueron repatriados a Costa Rica. Los cuerpos de tres mujeres costarricenses: Olga Martha Portillo Vargas, Bertha Murillo Bolaños y Beatriz Rodríguez Rojas, quienes fallecieron en el naufragio, llegaron a las 3:32 p.m., de este martes a Base 2 del Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, ubicado en Alajuela, centro del país.
Tras la llegada de los féretros, oficiales del Servicio de Vigilancia Aérea de Costa Rica hicieron una escolta de honor y llevaron los cadáveres hasta una capilla, donde se ofició una misa. Mientras tanto, en la Costa del Caribe nicaragüense continúan con la búsqueda de Leyner Contreras Murillo, de 13 años, hijo de Bertha y la última víctima aún desaparecida en alta mar.
El embajador de Costa Rica en Nicaragua, Javier Sancho, en conferencia de prensa dijo sentirse agradecido con el Gobierno de Nicaragua y de Estados Unidos que participaron en la búsqueda y rescate de las últimas víctimas desaparecidas.
CANATUR PIDE REVISIÓN
Mediante un comunicado, la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur) expresó ayer sus condolencias a los familiares de las víctimas del naufragio e hizo un llamado a trabajar en conjunto para inspeccionar el transporte acuático.
“Llamamos a las autoridades nacionales, autoridades municipales, Fuerza Naval y Policía Nacional, a trabajar conjuntamente con el sector privado para que a la brevedad sean revisados los protocolos que regulan el transporte acuático a los turistas, así como la revisión de los medios de transporte y personal que prestan servicio al turismo nacional y extranjero”.