14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.
Guillermo Cárdenas Montalván

El talento por el capital

En materia de desarrollo para un país como Nicaragua es fundamental mantener las variables de educación, producción y de inversión en la misma proporción de crecimiento, teniendo claro que cuando nos referimos a la variable educación no nos estamos refiriendo al aumento de la matrícula, sino a la relación que debe existir entre el mejoramiento de la calidad educativa y el producto, en este caso el recurso humano que el sistema educativo prepara para entrar al mercado laboral.

Todos en nuestra bella Nicaragua estamos claros y conscientes que nuestra educación en general, desde la primaria hasta el nivel universitario, necesita un replanteamiento de cara a las exigencias de un mundo competitivo y cada vez más demandante de mano de obra calificada. Hablamos de obreros calificados, técnicos y profesionales competitivos.

Debemos reconocer que el modelo educativo implementado en nuestro país hasta la fecha, no ha alcanzado los resultados esperados y lo que hemos logrado es aumentar la brecha muy significativa entre la calidad de nuestra educación y otras del continente americano que se encuentran en niveles competitivos, tales como las de Chile, Uruguay y Argentina, que según el Foro Económico Mundial en 2015 son las primeros tres países con mejor educación en Latinoamérica, seguidos de Panamá, nuestro vecino centroamericano, en cuarto lugar.

Según el Foro, Europa domina el ranking global de capacidades y educación, con siete de los 10 primeros lugares. Pero lo más interesante de todo es que los países que puntean con mejor educación son países que han desarrollado la educación técnica, por encima de la educación superior, como lo reflejan también los países con economías emergentes como los BRICS, acrónimo de los países de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.

Este comportamiento mundial de los países, en materia de educación, es un indicativo hacia donde se están dirigiendo los mayores esfuerzos y la mayor inversión de la educación. La educación técnica es la que ha permitido a todos estos países, con economías desarrolladas y economías emergentes, a proporcionar el talento humano con capacidades técnicas a nivel profesional. La inversión en educación técnica permite a los países utilizar su propia mano de obra, encuentran el encadenamiento entre el tipo desarrollo planificado y de acuerdo con esta estrategia preparan sus recursos humanos con las capacidades necesarias para desempeñar las distintas labores.

En Nicaragua, el reto está en diseñar y desarrollar un sistema de educación técnica con nivel profesional, que garantice calidad por parte del sistema educativo y además acorde al sistema productivo y a los planes de desarrollo del país. Este modelo de educación técnica debe considerar como eje primordial al individuo en el foco del proceso, su formación técnica integral con valores que hagan del individuo un recurso humano innovador, mediante la suma de la formación, el talento y sus habilidades. Un sistema que haga a la educación pública recuperar su prestigio, apoyados en el talento de nuestros jóvenes.

El autor es economista y abogado.

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí