Si un genio le otorgara un deseo ¿qué pediría?
El único deseo es que libere a este pobre país.
¿Qué apodo se pondría?
Una vez me dijeron “Nicki, El Audaz”.
¿León o Granada?
Managua.
¿Qué es lo más raro que ha bebido?
El ajenjo. Es una bebida verde española.
¿A qué personaje histórico le gustaría entrevistar?
Al único que me gustaría entrevistar, y no es porque esté de moda, es a don Rubén (Darío).
¿Cuál es el oficio más aburrido?
¡Diputado!
¿Tiene algún hábito extraño?
Tengo costumbres que a la gente le resultan extrañas: más de cincuenta años de no tomar ni azúcar ni sal ni vinagre.
¿Tipo de música favorita?
El jazz progresivo y la música clásica.
¿Alguna pesadilla recurrente?
Mis sueños son bellísimos, a colores y todos son sabrosos.
¿Cuál es el objeto más extraño que tiene?
El mojón de la salida de Managua a Masaya en 1870, grabado con la administración del presidente Guzmán.
¿Tenía amigos imaginarios de pequeño?
No… Yo siempre he sido cuerdo.
¿Qué lo pone nervioso?
Eso es muy difícil. Ni cuando me metieron preso los sandinistas me puse nervioso.
¿Si mañana pudiera hablar con Daniel Ortega qué le diría?
Le aconsejaría que eduque a sus hijos.
¿Qué es lo peor que le pasó estando preso?
No comer.
¿Cuál es su olor preferido?
Una agüita de colonia que uso desde hace sesenta años, se llama 4711.