De los nueve humedales de importancia internacional que tiene Nicaragua, seis presentarán un incremento en su temperatura de unos dos grados centígrados para el año 2030, según una proyección climática realizada por Centro Humboldt.
Los humedales son ecosistemas que ayudan a estabilizar a otros ecosistemas, además sirven para suministrar agua dulce, alimentos, biodiversidad, control de crecidas en lagos, ríos y mares, recarga de aguas subterráneas y mitigación del cambio climático, según detalla la Convención Ramsar, organismo creado para la conservación de estos.
En el análisis elaborado por Centro Humboldt, Maura Madriz, oficial de Gestión de Riesgos y Velia Castillo, oficial de Recursos Naturales, afirman que en al menos tres humedales habrá -para 2030- una reducción de los registros de lluvias de entre el 25 y el 28 por ciento en comparación con los datos históricos.
Esta falta de lluvia afectará más a los humedales como el Sistema Lacustre Playitas-Moyuá-Tecomapa en Matagalpa y Deltas del Estero Real y Llanos de Apacunca en Chinandega, porque se encuentran ubicados dentro del corredor seco del país.
Madriz y Castillo, tomaron como referencia el año 2030, porque en ese año se tendrá la evaluación final del nivel de cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS).
Si bien también se espera que en tres humedales haya para 2030 un incremento de aproximadamente el 10 por ciento en sus registros de lluvias, también se presentará un incremento significativo de los registros térmicos, “lo que implicará un aumento de la evapotranspiración en la zona, generando un desequilibrio en el ecosistema y una afectación directa en la vida de las poblaciones cercanas”, explican las expertas.
Las proyecciones de Centro Humboldt fueron elaboradas a partir de la información contenida en el Atlas Climático correspondiente al período 1971-2000 y con las estimaciones obtenidas con el Modelo Climático Regional PRECIS (Providing REgional Climates for Impact Studies).
IMPORTANCIA AMBIENTAL DE LOS HUMEDALES
Los humedales en Nicaragua, representan el 0.19 por ciento de las hectáreas que componen los humedales de todo el mundo. Según la Convención Ramsar actualmente, 169 países del mundo poseen humedales reconocidos, esto equivalente a 214, 326,438 hectáreas.
En Nicaragua, humedales como San Miguelito y Río San Juan albergan especies endémicas, que únicamente sobreviven bajo estas características. Además, este tipo de ecosistemas tienen un alto potencial para el desarrollo de actividades económicas como la recreación en el turismo sostenible.
