El gremio de taxistas de la cooperativa La Gran Sultana, sigue presionando a las autoridades locales para que regulen la presencia de taxistas piratas en la ciudad de Granada. Ayer hicieron un paro y muchos tuvieron que caminar a sus trabajos y los estudiantes a sus escuelas. Según los demandantes tienen un año de estar pidiendo a la alcaldía y la policía que saquen de circulación a unos 90 taxistas piratas.
“Andan sin seguro, usan vehículos en mal estado, andan cadetes que no son conocidos, placas de otros departamentos y la situación es que esto se ha incrementado y la policía no pone de su parte, de detenerlo, pedir documentos y aplicarles la multa”, dijo a medios locales Alexis Bermúdez, dirigente de la cooperativa La Gran Sultana.
Dijo que la jefatura policial se comprometió con el gremio en diciembre pasado a dar respuesta sobre el tema. “Ya agotamos la vía administrativa, los piratas andaban por la libre en el mes de diciembre y nadie dice nada”, dijo Bermúdez.
El paro de los taxistas legales se hizo desde las primeras horas de la mañana hasta el mediodía. Dijeron que este jueves arreciarán su demanda. “Mis niños tuvieron que caminar a la escuela, que está bastante lejos de la casa ante la falta de taxis”, dijo Jenny González. La señora explicó que incluso los taxistas estaban apostados en la esquina de la cooperativa impidiendo el paso de otros que querían trabajar.
Los huelguistas se quejaron del encargado de transporte municipal, porque dicen que no hace nada por el problema alegando que la policía no lo apoya.
Por su parte la población se desbordó en quejas contra el gremio de taxistas legales, porque dicen que no quieren trabajar, cobran lo que les da la gana y no les gusta llevar al pasajero a sitios alejados, sin embargo los ilegales están dando un mejor servicio.
LAS TARIFAS
La gente coincidió que las tarifas nadie las controla. Por ejemplo del parque Sandino al Julián Quintana, cobran 15 y hasta 20 córdobas. Igual ocurre a otros sitios alejados como el hospital y los juzgados, que cobran hasta 20 córdobas, mientras a otros barrios cercanos a los juzgados hasta 50 córdobas.
“Aquí no tenemos tarifa según la ley, es un acuerdo convencional entre el prestatario del servicio y el usuario”, dijo Bermúdez, de la cooperativa La Gran Sultana.