El uso de mascarillas por las tolvaneras se está volviendo cada vez más común en León. Desde ayer se hicieron sentir con intensidad en cinco municipios del departamento y en Chinandega. Las tolvaneras acompañadas de vientos huracanados afectan los municipios de León, Telica, Quezalguaque, Malpaisillo y La Paz Centro, donde las tierras son utilizadas para la siembra de maní, ajonjolí y caña.
Sobre la Carretera Panamericana los conductores de vehículos circularon ayer cautelosos, con las luces encendidas, para evitar accidentes de tránsito. Las viviendas se encuentran cubiertas de polvo y con dificultades se logra cocinar.
El comercio también se ha visto afectado debido a la cantidad de polvo que cae sobre las mercaderías y aunque oficialmente no hay reportes de las autoridades de salud es notoria la asistencia de pacientes a los diferentes centros de salud, a causa de males respiratorios.
Las tolvaneras se levantan de las huertas de maní y ajonjolí ubicadas al este de León.
“Estamos afectados, gente que está en el Gobierno no hace nada por León, los responsables son los maniceros”, dijo don Ricardo Flores.
Carmen Sánchez, habitante del reparto Andrés Zapata, dice no aguantar la picazón debido al polvo.
Los barrios más afectados son Venceremos, Posada del Sol, María Sampson, San Jerónimo, William Fonseca, San Carlos, Villa Soberana y el centro histórico de León.
También los trabajadores de varias empresas y operadores de gasolineras están utilizando mascarillas para poder trabajar.
¿Y LAS CORTINAS ROMPEVIENTO?
Ante la problemática ambiental que atraviesa el occidente del país el año pasado las autoridades tenían previsto iniciar la siembra de 475,000 plantas en León.
El proyecto de sembrar cortinas rompeviento se dividiría en dos etapas durante los próximos 11 años. Las autoridades no han brindado un informe de los resultados de la siembra el año pasado.
La población ha señalado en diferentes medios locales que las autoridades no ponen alto al despale indiscriminado en diferentes áreas de León.
TAMBIÉN EN CHINANDEGA
En Chinandega también el viento se sintió fuerte ayer y “atizó” varios incendios forestales en la zona. El productor Luis Reinaldo Pérez lamentó ayer que el fuego haya arrasado con dos silos de pasto, reserva de alimento para el ganado en marzo y abril. Declaró que al momento del fuego corrieron riesgo ante el abundante humo y los corrales que se encendieron.
“Tuvimos que sacar el ganado. Gracias a Dios no hubo víctimas, pero los daños son cuantiosos”, dijo el productor. Efraín Quiñones dijo que fue difícil conducir en la ciudad de Chinandega por las tolvaneras que envuelven la ciudad.