14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Encuesta y el empleo informal

La Encuesta de Empresas Sostenibles Nicaragua 2015, del Cosep, define como informales todas las empresas no registradas en las instituciones públicas, y utiliza también como indicador el porcentaje que lleva contabilidad formal o no. Luego las clasifica por tamaño, y define como “microempresas” aquellas que generan de entre 1 a 5 empleos.

La Encuesta de Empresas Sostenibles Nicaragua 2015, del Cosep, define como informales todas las empresas no registradas en las instituciones públicas, y utiliza también como indicador el porcentaje que lleva contabilidad formal o no. Luego las clasifica por tamaño, y define como “microempresas” aquellas que generan de entre 1 a 5 empleos.

La encuesta muestra que el volumen y valor de las ventas, el acceso a recursos (crédito, asistencia técnica, capital humano) y el porcentaje que lleva contabilidad y se encuentra registrado, se incrementa con el tamaño de las empresas. Existe una clara relación entre estos indicadores y el tamaño de las empresas.

Desde el punto de vista convencional, los informales lo son porque no desean pagar impuestos y cotizar al Seguro Social, y de esta manera ganarían ventajas competitivas sobre los formales. Sin embargo, las ventajas parecen estar del lado de las empresas más grandes. Por ello, se argumenta que para contribuir a formalizar a los informales, habría que hacerles ver que, si se “formalizan”, comenzarían a tener los mismos beneficios que las empresas formales.

La paradoja se resuelve si adoptamos un concepto diferente del empleo informal, que caracteriza el tipo de empleos atendiendo la productividad de los mismos. Desde este punto de vista, las microunidades “informales” no son empresas propiamente dichas. Son, principalmente, unidades de sobrevivencia que genera la población para sobrevivir, sin ningún acceso a los recursos.

En estas microunidades predominan los trabajadores por cuenta propia de muy baja calificación y los trabajadores familiares sin pago, y solo unas cuantas logran contratar a algunos ayudantes asalariados. La productividad y los ingresos de quienes encuentran ocupación en estas microunidades son muy reducidos.

Esta estructura del empleo es la contrapartida de una estructura productiva en donde algunas empresas de mayor tamaño relativo generan empleos de mayor productividad e ingresos, pero solo generan porcentajes menores del empleo, mientras decenas de miles de microunidades generan el grueso del empleo, pero de bajísima productividad e ingresos.

Dado que la productividad promedio de la economía es un promedio ponderado, siendo el factor de ponderación el peso de cada sector de la actividad económica en el empleo, el hecho de que la mayor parte del empleo sea generado por microunidades de bajísima productividad, deprime la productividad promedio, y el ingreso per cápita.

Existen factores históricos detrás de esta realidad. El país se especializó en producir y exportar un número bastante limitado de bienes de reducida complejidad y elasticidad ingreso de la demanda a largo plazo, y limitados encadenamientos intersectoriales. Estas actividades no logran crecer con la rapidez necesaria ni generar un número creciente de empleos de creciente productividad.

En aquellas actividades de mayor densidad de capital, en las que existen economías de escala, las grandes empresas tenderán a generar muy poco empleo. En las actividades que atienden el mercado interno, en un mercado tan reducido, un número limitado de empresas de mayor tamaño “copan” rápidamente el mismo, atendiendo principalmente los segmentos del mismo de mayor ingreso relativo.

Para afrontar las presiones de la competencia internacional, las empresas más grandes emplean estrategias de racionalización y modernización que aumentan su productividad pero limitan su capacidad de generar empleos.

La única opción para romper este círculo vicioso sería diversificar la economía hacia actividades de mayor elasticidad ingreso de la demanda y mayor grado de complejidad y densidad de encadenamientos, que generen porcentajes crecientes del empleo. Esto requeriría un esfuerzo nacional sostenido que involucraría inteligencia de mercados, asegurar financiamiento de la inversión de medio y largo plazo, coordinación de inversiones complementarias y acceso a tecnología, una importante inversión en capital humano y sobre todo, un esfuerzo por desarrollar la capacidad tecnológica del país.

*Economista.

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí