Todo ha cambiado en la carrera profesional de René “El Gemelo” Alvarado. Ya no es el joven enfocado en un título mundial, sus promotores de Golden Boy no lo ven así, vivió una alegría fugaz cuando se hizo campeón plata del Consejo Mundial de Boxeo, y ayer por la mañana se hizo oficial su siguiente pelea, la cual será en Los Ángeles ante Manuel Ávila el 1 de abril.
“El Gemelo” está siendo convertido en una escalera para boxeadores de Golden Boy. Desde su firma recibió el chance de pelear ante Rocky Juárez, un veterano puesto para que el nicaragüense se proyectara y René falló, lo hizo frente a un boxeador jubilado, y luego de aventurarse en México en las 130 libras sorprendió derrotando a Juan Pablo Sánchez.
Ahí terminó todo, desde ese momento solamente ha recibido oportunidades contra púgiles muy superiores de los cuales ha perdido sin discusión alguna, catalogados como contendientes de coronas mundiales (Eric Hunter, Joseph Díaz y Andrew Cancio).
Manuel Ávila, el nuevo rival, de padres mexicanos pero nacido en Estado Unidos tiene 19 victorias sin derrotas y una de sus presentaciones exigentes fue ante el cubano Yoandris Salinas, el cual no continuó después del sexto asalto, muy golpeado, derribado en el segundo round y con una lesión según mencionó en su mano derecha.
En la última presentación de Alvarado se vio con mucho ímpetu pero sin técnica, valiente pero sin ideas, todo lo contrario que su próximo adversario y con una proyección inminente. Aferrado “El Gemelo” a lo improvisto ha forjado una carrera de 23 triunfos y 6 derrotas, espera que la noche de primero de abril en el Belasco Theater regrese el aura del triunfo, aunque parece distante.
De una cosa no hay duda, René en las 126 libras ha derrotado a todos los rivales nicas, pero en su salto internacional se estancó.