Asedios a la libertad es el nuevo libro de Guillermo Rothschuh Villanueva que refiere sobre el acceso a la información pública, la publicidad oficial, la concentración de medios de comunicación y la autocensura entre otros temas en los que analiza el comportamiento de los medios de comunicación de Nicaragua frente al poder y a la ciudadanía.
Rothschuh Villanueva habla de estos temas, los que mira con lupa, y dice; “que constituyen los ejes rectores de los que debemos partir para el análisis de la comunicación y del periodismo en Nicaragua. A partir de estos elementos podemos deducir cómo están en el presente y cual será su tendencia en el futuro”.
También advierte que son factores para detectar “si puede existir una tendencia de apertura en los medios”, a la que se muestra escéptico.
Para el periodista Carlos Fernando Chamorro, está edición “plantea con rigor analítico el itinerario del deterioro de la libertad de prensa durante los últimos nueve años”.
No obstante Chamorro, sostiene Rothschuh, aborda “el desconocimiento a la ley de Acceso a la Información Pública, el bozal impuesto a los funcionarios públicos, la existencia de un duopolio televisivo y la autocensura, forman parte del conjunto de factores que limitan el ejercicio de la libertad de expresión”.
Para Rothschuh el problema fundamental, en los medios y en Nicaragua, es mucho más agudo por la supresión de rostros y voces de la televisión.
“Uno pasa revista por las mañanas en los programas de opinión y lo que nos damos cuenta es que hay una orquestación en donde desfilan las mismas personas en diferentes canales hablando de lo mismo”.
“Es decir el horizonte de la libertad de expresión se oscurece cuando las posibilidades de las formas de expresión se reducen. Lo más complejo es cuando sumamos la falta de acceso a la información, el control absoluto de la publicidad oficial y las agresiones directas o indirectas contra los periodistas, lo que ocurre es que esto conduce a la autocensura que es una de las calamidades que padece el periodismo”, dice el comunicador
La obra también refleja el papel de la crónica y cómo en la actualidad es un ejercicio constante, a lo que apunta Chamorro, “el periodismo narrativo de grandes crónicas y reportajes que, indefectiblemente, siempre prevalecerá ante la propaganda oficial”.