El mexicano Miguel Carranza Báez, de 78 años, acusado de tráfico internacional de droga, a ingresado a Nicaragua desde el 2011, procedente de Colombia, Perú y su país natal, según informe de Migración y Extranjería, presentado ayer entre las pruebas, por el Ministerio Público.
“El acusado tiene múltiples viajes a Nicaragua”, dijo el Fiscal Giscard Moraga durante la audiencia inicial en el Juzgado Quinto Distrito Penal de Audiencia de Managua.
Otros elementos de pruebas ofrecidas son actas de ocupación de la droga que llevaba adherida a su cuerpo, pruebas de laboratorio que indican que la sustancia traslada por el anciano es positiva a cocaína.
También están las declaraciones de trabajadores de migración que lo retuvieron en el puesto fronterizo de El Guasaule y oficiales que participaron en la investigación.
La defensa del procesado, se limitó a solicitar el traslado a medicina legal para revisión médica, ya que asegura que padece de presión alta.
El juez Julio César Arias admitió los elementos de prueba y remitió al mexicano a juicio para el 26 de mayo. Además lo remitió a medicina legal y le mantuvo la prisión preventiva. Según acusación fiscal, el procesado fue capturado el pasado 9 de febrero a eso de las 7:30 p.m en el Guasaule, frontera entre Nicaragua y Honduras, cuando se disponía trasladarse al vecino país con dos paquetes de cocaína adheridos al cuerpo.
EN PARQUE LA BIBLIA
Según acusación, el mexicano Miguel Carranza se reunió con dos desconocidos en el parque La Biblia, ubicado en Reparto San Juan de Managua, quienes le entregaron una bolsa de papel color café.
Luego, el mexicano se dirigió a la terminal de buses del mercado Israel Lewites, donde tomó un microbús de transporte interurbano hacia Chinandega, pero antes entró a un baño público, donde tardó casi 15 minutos.
Al llegar a la terminal abordó otro bus hacia El Guasaule, donde las autoridades de Migración lo retuvieron hasta que llegara la policía.