Centenares de indígenas marcharon ayer por la mañana por las calles del poblado de San José de Cusmapa, en Madriz, coreando el lema “Sin bosques no hay agua, sin agua no hay vida”, en rechazo a los daños ambientales y a fuentes hídricas que ocasiona el despale indiscriminado que se viene dando desde mediados del año pasado con la extracción de árboles de pino de comunidades boscosas, utilizando el “pretexto de eliminar el gorgojo descortezador”.
La marcha, que partió de la salida que conduce a la comunidad El Carrizo, fue presidida por las comunidades de bases de la Iglesia católica que se manifestaron porque se detenga el corte de árboles de pino que salen desde varias comunidades en que se ejecutan, supuestamente, planes de saneamiento para controlar el brote del gorgojo descortezador.
La marcha inició con un comunicado que fue leído por Marvin Antonio Maradiaga, del Consejo Pastoral de la Parroquia María Auxiliadora de San José de Cusmapa, para hacer un llamado a las autoridades de este municipio y del departamento para que “tomen una medida para combatir el gorgojo sin afectar el medioambiente y el recurso de agua”.
El texto del comunicado estaba inspirado en la Carta Encíclica del papa Francisco, documento que entregarían la tarde de ayer domingo a la alcaldesa de Cusmapa, María Elena Díaz Vásquez, y a funcionarios del Instituto Nacional Forestal (Inafor) y del Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (Marena) en el departamento de Madriz, en una reunión que habrían acordado la tarde de ayer para abordar la preocupación de los campesinos de las comunidades indígenas de este municipio sobre los daños ambientales.
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SE SUMAN DE OTROS MUNICIPIOS
A esta marcha se unieron delegaciones de campesinos de Las Sabanas y San Lucas, municipios vecinos de San José de Cusmapa, que también han sido afectados con la tala de los bosques de pino en estas zonas de Madriz.
La marcha concluyó en el nuevo templo en construcción con la misa dominical oficiada por el sacerdote Bernardino Ruiz, quien hizo un llamado a las familias del campo a cuidar también el bosque y los invitó a sembrar árboles en su propiedad.
Desde mediados del 2015 se ejecutan planes de saneamiento para el control de la plaga del gorgojo descortezador de pino en varias de las comunidades boscosas del municipio de San José de Cusmapa, autorizados por funcionarios del Inafor y del Marena del departamento de Madriz, la Alcaldía y el Concejo Municipal de esa comuna y de la Directiva de la Comunidad Indígena de Cusmapa, según lo han reconocido algunos de sus miembros.
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De esas zonas de San José de Cusmapa, en Madriz, salen a diario unos 12 camiones cargados con tucas de pinos supuestamente afectados por el gorgojo descortezador.
Marcos Ponce, técnico del Marena de Madriz, dijo en una reciente reunión que ya no se estaban extrayendo árboles de pino en zonas del municipio de Cusmapa, y que los camiones que seguían saliendo cargados con tucas de esa especie eran los que permanecían todavía con los pinos tumbados en las comunidades en que se ejecutó el plan de saneamiento.
“Lo malo de todo esto es que las autoridades del Inafor (Instituto Nacional Agro Forestal) y del Marena (Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales) no han explicado a las familias del campo qué es lo que están haciendo con los planes de manejo de los bosques de pino, y la falta de esa información y el ver salir tantos camiones preocupa mucho a la gente”, dijo ayer en entrevista el sacerdote de Cusmapa, Bernardino Ruiz.
“Estamos preocupados que producto del despale que se está dando de los bosques de pino se estén secando los pocos ríos que tenemos”, manifestó Juan Jiménez Miranda, habitante de la comunidad El Guailo, del municipio de San Lucas.
SED Y CALOR BRUTAL
“Nos estamos quedando sin agua, ya el viento nos está azotando fuerte y el calor por el sol es implacable. El agua viene por tuberías del río Tapacale que ya está seco. Ahora nos daban agua un día por semana y con eso apenas lleno un barril y los trastes, agua que debo estimar porque después me tocaría ir a buscarla a un lugar que le dicen La Tuna”, describió Esmeralda Carazo, habitante del sector número 1 del poblado de San José de Cusmapa.