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Monseñor Silvio Báez, goza del aprecio de los fieles católicos, por su honestidad y don de compartir el Evangelio. LA PRENSA/ ESQUIVEL

Monseñor Silvio Báez: “El pastor no debe tener ambiciones”

“Sentí el gozo de poder volver a Nicaragua para servir a mi pueblo como pastor. Esto me dio mucha alegría, aunque sabía lo compleja y difícil que era la situación del país. Acepté feliz y confiado en Dios”

Monseñor Silvio José Báez Ortega cumplió el viernes 18 siete años que el papa, Benedicto XVI, lo nombró obispo auxiliar de Managua, misión que asegura le ha transmitido mucha alegría con la cercanía al pueblo.

“Hace siete años en Roma, el 18 de marzo del 2009, el cardenal Juan Bautista Re, prefecto de la Congregación para los obispos, me comunicó que el santo padre Benedicto XVI me había nombrado obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua”, rememora Báez, doctor en Sagradas Escrituras.

Con el nombramiento regresa a su Nicaragua natal, luego de 30 años fuera del país, tiempo que los dedicó al servicio de su congregación los Carmelitas, así como su carrera de estudioso y profesor de la Biblia en universidades europeas.

“En estos siete años solamente he querido ser fiel a Jesús, que me ha llamado inmerecidamente; vivir en comunión con mis hermanos obispos en la Iglesia y anunciar al pueblo de Dios desde mi pobreza la palabra del Evangelio como luz, consuelo y liberación”, asegura monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua.

“ACEPTÉ FELIZ”

En sus siete años de labor episcopal y como obispo auxiliar de Managua, monseñor Báez, sostiene que la experiencia ha sido invaluable al estar cercano en las alegrías y tristeza del pueblo fiel.

“Sentí el gozo de poder volver a Nicaragua para servir a mi pueblo como pastor. Esto me dio mucha alegría, aunque sabía lo compleja y difícil que era la situación del país. Acepté feliz y confiado en Dios”, expresa monseñor Báez. El obispo considera que el pastor debe ser ante todo un hombre de Dios.

“Creo que un pastor debe ser ante todo, un hombre de Dios, de oración y de escucha de su palabra. Sin ambiciones, ni de poder ni de dinero, libre y profético, y muy cercano a las esperanzas y tristezas del pueblo”, reflexionó el obispo auxiliar de Managua.

EN COMUNIDAD POBRE

Monseñor Silvio Báez, en agradecimiento a Dios por el séptimo aniversario de su ministerio episcopal, realizará en Semana Santa sus ejercicios espirituales en la parroquia San Francisco de Paula, en el municipio de San Francisco del Carnicero.

“Lo he decido como un gesto de cariño y de misericordia en nombre de Jesús en este Año Jubilar de la Misericordia, hacia los más lejanos y pobres, esa es la parroquia más periférica y una de las más pobres de la Arquidiócesis de Managua”, reflexionó el guía espiritual y obispo auxiliar de la Arquidiócesis.

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