Con la campaña “Roberto Rivas, renuncia”, el Movimiento Democrático Nicaragüense (MDN) inició ayer una demanda ciudadana para que en el país se realice un proceso electoral transparente en noviembre próximo.
“Esta campaña es el resultado de las encuestas en la que la población nos dice que no cree en el señor Roberto Rivas y que no confía en el actual Consejo Supremo Electoral”, dijo el joven Léster Rodríguez, miembro del MDN.
Explicó que la campaña la mantendrán hasta que hayan verdaderos cambios en ese poder del Estado.
Rivas es el presidente del Consejo Supremo Electoral (CSE), señalado de hacer fraudes electorales a favor del FSLN.
“La población quiere votar, pero si hay un verdadero cambio en el poder electoral; y no es cambios de maquillaje, sino que se cambie el concepto de un consejo partidario que realmente respete la voluntad de voto”, señaló.
LA GENTE QUIERE VOTAR
De acuerdo con Carlos Bonilla, en las encuestas la población asegura que quiere participar en las próximas elecciones, pero aducen la falta de credibilidad del poder electoral, rectorado por Rivas desde hace más de veinte años.
“La gente es clara en las encuestas que nosotros hemos realizado; la población dice que quiere votar y quiere observación electoral, pero también señalan que los actuales magistrados del poder electoral no les brindan la garantía que su voto será respetado”, recalca Bonilla.
EN LUGARES PÚBLICOS
La campaña “Roberto Rivas, renuncia”, tiene como objetivo que el Gobierno escuche el clamor de los ciudadanos para que las próximas elecciones nacionales de noviembre se realicen en un ambiente de transparencia, bajo la observación de organizaciones nacionales y extranjeras.
“Solamente es que se respeten las reglas electorales, es todo, pero es elemental cambios en el sistema electoral porque es evidente que Roberto Rivas no es la persona idónea para contar los votos”, asegura Bonilla.
El Movimiento Democrático Nicaragüense es la organización que inició a demandar cambios en el sistema electoral, pero el FSLN se ha negado a realizar esas demandas que se han convertido en un clamor nacional.
MIÉRCOLES DE PROTESTA
La demanda por cambios en el Consejo Supremo Electoral (CSE) se viene planteando desde hace muchos años, pero el gobierno de Daniel Ortega Saavedra ha ignorado las demandas de los ciudadanos, de partidos políticos y de la misma Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN).
Los “miércoles de protesta” por ejemplo, se institucionalizaron hace un año, en el cual la Coalición Nacional por la Democracia, que lidera el Partido Liberal Independiente (PLI) y organizaciones de la sociedad civil, demandan frente al poder electoral cambios profundos del sistema electoral, que incluyan la entrega de cédulas sin intereses ideológicos, así como la actualización del Padrón Electoral. Pero el Gobierno continúa en silencio.