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Campesinos anticanal

El Gobierno alega que la actuación policial en contra de los campesinos, que marcharon en octubre de 2015 en Managua opuestos al Canal Interoceánico, fue para garantizar la seguridad. LA PRENSA/ARCHIVO

Procurador de Nicaragua da su versión ante ONU

El informe fue presentado en Ginebra, Suiza, el Miércoles Santo, según publica el oficialista 19 Digital, a través del cual alega que la marcha fue sin permiso, que más bien los policías fueron víctimas de los que protestaban contra el Canal Interoceánico.

El procurador Hernán Estrada presentó ante la oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas un informe sobre derechos humanos en relación a la marcha campesina contra el Canal, cinco meses después de la misma.

El informe fue presentado en Ginebra, Suiza, el Miércoles Santo, según publica el oficialista 19 Digital, a través del cual alega que la marcha fue sin permiso, que más bien los policías fueron víctimas de los que protestaban contra el Canal Interoceánico.

Y en el mismo, hace alusión a uno de los casos de las víctimas de agresión registrado ese día, al concluir la marcha campesina en el sector de Bello Horizonte, tras ser desviada a causa de la fuerte presencia tanto de la Policía como de los grupos de motorizados afines al Gobierno. Pero alega que toda la actuación policial fue para garantizar la seguridad.

Sobre el único caso que menciona, la Fiscalía recibió denuncia por agresión física contra Darwin Francisco Jirón Espinoza, no obstante, alega que “por la complejidad del disturbio y el ocultamiento de rostros, no ha sido posible en la investigación policial identificar a los agresores ni los instrumentos del delito, presupuestos necesarios para determinar causa probable”, dice el informe de Estrada.

Y dice que en el hecho intervino en protección de Jirón Espinoza, el agente de la Policía Juan Gabriel Morales López, “quien refiere haber observado que una pareja que portaba una bandera azul y blanco, estaba siendo agredida por individuos motorizados, interviniendo en protección de los agredidos”, resultando a su vez lesionados los policías Morales López, Jorge Luis Jarquín y Marlín Sánchez.

En su momento el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) presentó un informe con testimonios de los participantes en la marcha que demuestran la represión sufrida. Uno de ellos fue el de Jirón Espinoza, agredido por tres motorizados vestidos con chaquetas negras, rostros cubiertos por pañoletas negras, quienes se bajaron de las motos y procedieron a patearlo, golpearlo con un bastón (que en la punta tenía una pelota) y con un tubo metálico, ocasionándole una fractura en su codo derecho, lesiones en su espalda y brazos; siendo operado por esa causa, dice el Cenidh. En su testimonio, Jirón Espinoza aseguró que uno de los agresores le dijo que esto le pasaba “por meterse con el Gobierno del comandante”.

Hernán Estrada, procurador general de la República. LA PRENSA/ARCHIVO
Hernán Estrada, procurador general de la República. LA PRENSA/ARCHIVO
Critica informe oficial

El director jurídico del Cenidh, Gonzalo Carrión, dijo que “la complejidad y el hecho mismo que redunda en impunidad es porque se investigan a sí mismo”.

“Estamos hablando de una farsa elevada internacionalmente ante un órgano especializado… una mentira internacionalizada”, insistió Carrión, quien señaló que ese día de la represión policial observó desde una gasolinera que el desplazamiento de las fuerzas especiales “era simultáneo al de los motorizados agresores”.

“Es propio de este Gobierno pues, no va a reconocer así no más violaciones a los derechos humanos”, agregó.

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COMENTARIOS

  1. maria de los angeles
    Hace 8 años

    Que cinismo el del terrateniente procurador Hernan Estrada, fui testigo presencial cuando las fuerzas especiales y los paramilitares oficialistas motorizados, tenian una comunicacion interna con audifonos especiales donde recibian las ordenes policiales, Hernan Estrada es un cinico que ha expropiado fincas a humildes campesinos y se las ha adjudicado, en el departamento chinandegano. Hay pruebas que los despojados las tienen guardadas.

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