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De la finca a su taza

Inspirados con 13 quintales de café y el deseo de convertir el patrimonio familiar en una marca que dejará huella a nivel nacional, un matrimonio originario de San Juan de Río Coco, en Madriz, se aventuró en el negocio de su vida, su pasión y su máximo esfuerzo.

Inspirados con 13 quintales de café y el deseo de convertir el patrimonio familiar en una marca que dejará huella a nivel nacional, un matrimonio originario de San Juan de Río Coco, en Madriz, se aventuró en el negocio de su vida, su pasión y su máximo esfuerzo. Heberto Rivas y su esposa, Mayerling Gurdián, propietarios de Café Gourmet De La Finca, iniciaron hace cuatro años su sueño por llevar al paladar de los nicaragüenses una propuesta de alta calidad y accesible.

“Fue en 2010 cuando junto a mi esposa nos alegramos porque el café de la familia lo había comprado un cliente de Estados Unidos y lo ofrecían en Bird Rock Coffee. Entonces vino la primera chispa de la idea, ¿y si le damos valor agregado al grano?”, recuerda Rivas.

Fue en ese entonces que iniciaron con la puesta del nombre y pensando entre ambos, un significado y algo que fuera fácil de recordar, tomaron en cuenta que cada vez que encontraban a una amistad, siempre les preguntaban: ¿de dónde vienen?, a lo que ellos respondían: de la finca.

Fue de esa forma tan fácil y práctica —recuerda este emprendedor— que llegaron a ponerle ese nombre a su propuesta de café.

Gurdián recuerda que se tomaron casi un año para registrar el nombre y que tuvieran todos los permisos para operar. Fue así que en 2012 iniciaron con los 13 quintales, una producción de apenas cincuenta libras, que fácilmente vendieron en una feria en la que participaron en el Centro Juvenil Don Bosco, en Managua.

“Eso solo nos permitió darnos cuenta que había aceptación, que la gente sí puede pagar por la calidad y así iniciamos todo un proceso de preguntas a la gente para ir mejorando. Nos llevamos todo un año consultando a los clientes de ese momento cómo lo querían y qué características debería tener para lograr una muestra espumosa”, explica Gurdián.

MÁS QUE ENTUSIASMO

El matrimonio dedica desde entonces 15 manzanas para la producción de café y Rivas empezó a tocar las puertas de diferentes lugares para que les comprara el producto.

“No fue fácil —recuerda Rivas— pero con el tiempo viene la recompensa cuando te das cuenta que poco a poco te abrís paso en un sector que está saturado por diferentes oferentes”, expresó el emprendedor.

Y aunque hubo momentos de flaqueza por parte de Rivas, su esposa fue pilar para que este no abandonara su sueño de llevar a los nicaragüenses un café de alta calidad, cultivado a más de 1,200 metros sobre el nivel del mar.

En ese inicio la respuesta por parte de los posibles compradores era negativa, pero ya en 2016 son más de 50 los clientes que les compran y que está presente en los estantes más finos del país.

OTRO PRODUCTO

Tras leer sobre el uso de abejas en las plantaciones de café, Rivas decidió comprar las colmenas y que el polen de las abejas rociara los cafetos.

“Luego vimos cómo empezó a mejorar los rendimientos y con la miel que estaba, teníamos que hacer algo. Fue así como también surge otro producto llamado Miel de Abeja De La Finca, una opción adicional que resulta el cuido de las plantaciones”, sostiene el propietario.

Cuando comenzaron fueron cinco barriles los que lograron producir, confiados en que mejoraría. Por las variaciones del clima en 2015 esa producción de miel solo llegó a 7.5 barriles.

UN DIFÍCIL CRECIMIENTO

Con los años fueron mejorando cada aspecto de la producción, pues ambos cuidan de cada detalle, desde la planta hasta el tostado y molido del grano.

Gurdián recuerda que cuando empezaron en el 2012 daban empleo a unas 30 personas, mismas que se incrementaron cuando establecieron el sistema de paralelo de producción de miel y en la actualidad son 47.

Y pese a que la apertura de mercado fue un proceso tardado, el matrimonio cuenta que pasaron de procesar 13 quintales a 300 quintales por cada producción.

“Para nosotros la innovación es un papel importante porque se requiere estar dándole cada vez un nuevo sentido a las formas tradicionales de cómo se pueden hacer las cosas”, expresó.

Ese proceso constante de innovación lo ha llevado a sumar seis personas más, pues una de las metas que han cumplido es la apertura de una cafetería en el reparto El Dorado, Managua.

“La persona podrá estar viendo el proceso y la forma cómo sea tratado el grano hasta que llegue a su taza y es un mecanismo para que desarrollen confianza”, dijo Rivas.

FUERTE COMPETENCIA

Mayerling Gurdián, quien también es madre de un niño y de una niña, proyecta que una vez posicionado su producto a lo interno del país el siguiente paso sería desarrollar una línea de franquicias por todo el territorio.

“¿Y por qué no soñar con extendernos por la región como una opción de calidad para los paladares más exigentes?”, se cuestiona Gurdián.

“Soñamos con que haya mucha calidad en el producto, atención personalizada y ofrecer bebidas nuevas cada vez que se pueda”, refiere Rivas.

Según Gurdián esperan ofrecer en la cafetería que lleva el mismo nombre que el café y la miel de abeja, entre 25 y 30 variedades de cafés especiales.

Y para ello ahorraron e invirtieron para traer maquinaria de Estados Unidos, que les permita entregar a sus clientes las bebidas más exquisitas y espumosas con el fin de incidir en el cambio de una cultura que prefiere bebidas de importación u otras que dañan la salud.

Rivas, quien es ingeniero agrónomo, recomienda a cualquier persona que desee tener su propio negocio que estudie y se informe lo más que pueda sobre el giro de negocio que busca. “Que investigue a fondo todo lo relacionado a la industria en la que espera desenvolverse para darse cuenta, sí en realidad esa es la pasión que le despertará cada día”, menciona Rivas.

Por su parte, su esposa Mayerling, quien es ingeniera en computación, afirma que cuando una persona descubre y desarrolla su pasión, nada le podrá detener.

“La idea en cualquier giro de negocios es que haga algo que disfrute a diario, que no sea una carga sino una oportunidad para aprender más”, destaca.

Quieren formar talento

Mayeling Gurdián, propietaria de Café Gourmet De La Finca, sueña con que un día puedan desarrollar una escuela de baristas que tenga incidencia a nivel nacional y busque el fortalecimiento de las capacidades de los jóvenes que les gusta y son atraídos por esa profesión.

“Soñamos con poder brindarle a muchos jóvenes la oportunidad de aprender y crecer profesionalmente. En Nicaragua solo se puede estudiar para bartender y la idea es profesionalizar a aquellos apasionados por el café y que han hecho del barismo un estilo de vida”, manifestó.

Y como parte de ese proceso de mejoras en la calificación del personal, Gurdián agrega que desean brindarle a los consumidores “una mejor opción o un paquete incluido de una experiencia vivencial con el mundo del café (…) eso es lo que vamos a intentar cuando una persona se nos acerque”, refirió la emprendedora.

CONTACTO

Café Gourmet De La Finca está ubicado en residencial El Dorado, costado sur del parque.
Casa 192. Teléfonos: 89143930 y 88670423. Correo electrónico: [email protected]
También están en Facebook como: Esdelafinca

 

Nos vemos creciendo cada día, pese a cualquier obstáculo y convirtiéndonos en una cadena de cafeterías de alta calidad, pero accesible a los bolsillos de los nicaragüenses”.
Heberto Rivas, propietario
Café Gourmet De La Finca.

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