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Mauricio Diaz. LA PRENSA/Archivo

Nicaragua incumple Esquipulas II

Mauricio Díaz, diplomático y diputado de Nicaragua en el Parlamento Centroamericano (Parlacen), sostiene que el gobierno nicaragüense ha caído en “flagrantes violaciones” de los compromisos con la democracia representativa y participativa.

Mauricio Díaz, diplomático y diputado de Nicaragua en el Parlamento Centroamericano (Parlacen), sostiene que el gobierno nicaragüense ha caído en “flagrantes violaciones” de los compromisos con la democracia representativa y participativa a los que se comprometió al firmar el acuerdo del Procedimiento para establecer la Paz Firme y Duradera en Centroamérica.

Explica Díaz que “la lógica de dicho acuerdo era sustituir la guerra por la paz firme y duradera” a través del cumplimiento de una serie de compromisos que iban desde la aplicación de amnistías, cese al fuego, elecciones libres, libertad de expresión y democratización.

“En nuestro caso no ha sido así por varias razones —afirma Díaz— la primera es porque el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) se alzó con el poder como una fuerza que en la negociación tanto en Esquipulas II como en Sapoá, se impuso no dando lugar a una transición equilibrada de los grupos que se enfrentaban por las armas.

Lograron neutralizar y mediatizar el cumplimiento de los acuerdos y se alzaron como la fuerza hegemónica triunfante luego de las negociaciones de Sapoá”.

Sostiene el exdiplomático que en Nicaragua en la década de los noventa “no hubo justicia transicional y el proceso de reparación fue manejado de manera arbitraria y desde el FSLN”.

Díaz valora que “mal que bien” en el resto de países signatarios de Esquipulas II ha cumplido los acuerdos transitando de la guerra a la posguerra y a la búsqueda de la paz con democracia.

“Guatemala nos está dando un ejemplo con la Cicig (Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala), con el respaldo de la ONU. En El Salvador, FMLN y Arena respetan las elecciones y la alternabilidad en el poder; Honduras combate su corrupción con apoyo de la Organización de Estados Americanos (OEA).
“Solo nosotros parecemos una isla de impunidad en tierra firme”, afirma.

Díaz evidencia el incumplimiento en que el actual Gobierno ha debilitado el sistema democrático y “conduce al país a ser considerado una democracia fallida”, mediante los fraudes electorales y el irrespeto a las libertades de la gente, como el de manifestarse en contra de sus políticas.

Política Esquipulas II Mauricio Díaz Nicaragua archivo

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