El Instituto Regulador del Transporte del Municipio de Managua (Irtramma) empezará a controlar a 120 buses de la capital en cuanto a la velocidad permitida y rutas asignadas, por medio del Sistema de Posicionamiento Global (GPS por sus siglas en inglés).
El anuncio fue oficializado por la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, quien explicó que la instalación de los GPS se realizará en toda esta semana y que solo es la primera etapa del proyecto.
“En Managua la estrategia de modernización del transporte urbano colectivo del municipio está siendo revisada por la Alcaldía (de Managua)”, informó Murillo a través de medios oficialistas.
El dispositivo de rastreo, que se coloca en una parte no visible del automotor, estará conectada a un centro de control satelital que funcionará las 24 horas del día y estará en poder de las autoridades del Irtramma para tomar medidas en caso que los conductores viajen a exceso de velocidad o abandonen su corredor de forma injustificada.
LA PRENSA buscó a Danilo Sánchez y Miguel Álvarez, dirigentes del transporte capitalino y allegados al Gobierno sandinista, para conocer ampliamente otros aspectos del proyecto, por ejemplo quién asumirá el pago de los GPS y cuáles son las rutas a las que se les instalará de primero. Pero a ninguno se les logró localizar.
La instalación de GPS en el transporte colectivo del país es una medida por los accidentes de tránsito en que han estado involucrados buses del transporte intermunicipal. La exigencia también abarca a las unidades escolares.
OCHO AÑOS EN DEUDA
En 2008 el entonces director del Irtramma, ingeniero Francisco Alvarado, anunció que todos los buses del transporte colectivo serían monitoreados por GPS para evitar que los conductores viajaran a exceso de velocidad.
La promesa no se cumplió y cinco años más tarde, en medio de la implementación del pago electrónico en el pasaje, se volvió a prometer el GPS. En enero del 2014 Alvarado sorpresivamente dejó el mando en el Irtramma sin cumplir con la nueva tecnología al sector.
En marzo del 2013 el Gobierno central logró sacar de circulación los buses amarillos, como parte de la modernización del sector.